Georgina Rodríguez es muy sincera. En esta ocasión no le ha importado hablar de las redes sociales y del papel que juegan algunas personas dentro de ellas. Hace poco más de tres años, la influencer era una auténtica desconocida. Trabajaba en una tienda de lujo como dependienta. Allí se enamoró de Cristiano Ronaldo, un flechazo a primera vista. Una vez se formalizó su relación, la cuenta de Instagram de la empresaria empezó a crecer a un ritmo descontrolado. Ahora alcanza los 22 millones de seguidores. Era la influencer más seguida de Europa, pero Ester Expósito le ha arrebatado ese título.
La de Jaca ha contado en la revista Mujerhoy la percepción que tiene de muchas personas desde que es famosa. Siente cierta "envidia" hacia ella y Cristiano Ronaldo. Por este motivo cada vez le cuesta más confiar en los demás. Su vida ha cambiado radicalmente y ahora se encuentra con gente que se hace pasar por amigas o amigos de toda la vida solo con un claro interés.
"Se me acercan muchos interesados. Hay gente con la que tuve contacto una vez en la vida y nunca más, hasta que eres conocida y reaparecen como si fueran íntimos amigos", ha explicado Rodríguez. A la modelo le cuesta mucho confiar en las personas, especialmente porque su círculo cercano ha estado siempre con ella, en las buenas y en las malas.
"Por suerte, hay gente que ha estado siempre y sigue estando de la misma manera. Hay de todo, pero sí valoro quién se acerca y para qué.Yo quiero a mi gente de verdad, de corazón, y me tienen para siempre", ha asegurado. Georgina confiesa que es una mujer "de pocas amigas", pero en las que tiene se mete "de corazón". De todos modos, ella siempre cuenta que las amistades se cuentan con los dedos de una mano. Pocas, pero de calidad.
"No todo el mundo tiene mi confianza", explica la influencer. Le gusta rodearse de personas auténticas. "Soy muy generosa con las personas que me demuestran bondad, responsabilidad, esfuerzo, perseverancia, gente que lo lucha por su cuenta. Esa gente me atrapa, me gana la gente trabajadora".
No es para menos, Georgina Rodríguez es una auténtica estrella, tal y como ella refleja en sus redes sociales. Así se define. Brilla por sí sola, aunque muchos intenten enturbiar su imagen con la presencia de Cristiano Ronaldo. Perfectamente maquillada para una sesión de fotografía y con un atuendo insuperable, muy atrevido y sensual, Georgina posa en un cómodo sofá con mirada neutra. Con un vestido estilo árabe enseña parte de su cuerpo gracias a las transparencias del mismo.