Desde principios de agosto Antonella Roccuzzo guardó absoluto silencio en sus redes sociales. Su última publicación donde se la ve posar sonriente en Ibiza con un impactante mini vestido de girasoles corresponde a un par de días antes del famoso burofax de Leo Messi en el que anunciaba su deseo expreso de abandonar el club.
La semana pasada el futbolista argentino confirmó que se quedaba en el Barça, por lo menos una temporada más. Leo Messi no quiere irse por la puerta de atrás y muchos con problemas con el club que se lo ha dado todo y la afición que siempre le ha respaldado. Además, cuando comunicó su decisión, Antonella y los pequeños se pusieron a llorar. No querían abandonar Barcelona.
Tras esta polémica de dos semanas, la familia ha recuperado sus rutinas. Esta misma mañana Messi se incorporaba a los entrenamientos con sus compañeros. Por otro lado, Antonella Roccuzzo por fin reactivaba su cuenta de Instagram con una preciosa instantánea que demostraba lo feliz que estaban de nuevo.
Antonella Roccuzzo subió una fotografía de los tres pequeños, juntos y sonrientes. La imagen estaba en blanco y negro que la dotaba de más profesionalidad. Una vez más la argentina grita a los cuatro vientos que está enamorada de sus “bebés”. Una sonrisa de ellos vale más que todo y para Messi también, por eso han sido determinantes para su decisión final.
"Bebés míos", escribía Antonella. Antes de volver a los entrenamientos, Leo recurría también a los niños para escenificar su 'regreso virtual'. Este fin de semana ha compartido una foto de los tres, muy sonrientes y deportivos, durante una escapada a la montaña.