María Teresa Matus continúa ajena a los movimientos que puedan producirse en el Barça con Arturo Vidal. En unas declaraciones que concedió en exclusiva a un medio chileno, la empresaria expresó su felicidad de establecer su residencia en Barcelona. A la chilena le apasiona el clima de la capital catalana. Pocos son los días donde hay que llevar ropa de abrigo y desde abril y a octubre se puede aprovechar perfectamente la playa y la piscina, sus lugares favoritos. Además adora la gastronomía del país. Sin duda ha encontrado su sitio.
No obstante, María Teresa Matus, aunque esté divorciada de Arturo Vidal, no quiere que sus hijos estén separados de su padre, por este motivo al empresaria trasladó su residencia de Alemania a Barcelona. Si el chileno se va finalmente del Barça, algo que parece 100% seguro esta tendría que hacer las maletas.
Por el momento, María Teresa Matus disfruta de sus últimos días de verano antes de que los pequeños empiecen el colegio y se de un descenso de las temperaturas. En la actual casa tiene piscina y se lo pasa en grande con sus hijos. Allí ha posado con multitud de bikinis y bañadores, pero ésta es la primera vez que posa con un trikini.
La chilena ha elegido un espectacular trikini con estampados floreados de colores azulados y toques rosados. Le favorecía a su piel bronceada y además le quitaba muchos años de encima por ese toque juvenil. Por lo que se ve en la fotografía que ha publicado, Matus estaba de fiesta con su hija pequeña. Las dos posan encima de una colchoneta repleta de gloros rosas.