Tiempo de desconexión para Sergi Roberto. El lateral de Reus, igual que el resto de jugadores de la primera plantilla del FC Barcelona, se ha marchado de vacaciones para descansar y tratar de olvidar la humillación sufrida a manos del Bayern de Múnich.
En el caso del canterano, no solo debe lidiar con el tormento del 2-8, sino que también ve como su continuidad en el club azulgrana no está ni mucho menos asegurada. Aunque su agente, Orobitg, aseguró que no saldrá mientras tenga contrato, los planes de la entidad van por otro lado: si llega una buena oferta, se considerará.
Mientras su futuro está en el aire, él disfruta de unas relajantes vacaciones con su esposa, Coral Simanovich. La modelo israelí es el mayor apoyo del catalán en estos momentos. Ella, además, aprovecha el descanso en la playa para presumir de su bikini de leopardo.
Para que no hubiera dudas de cómo de bien le quedaba, la influencer se hizo dos sesiones de fotos. Una en color, y otra en blanco y negro. La conclusión es clara. Se vean o no los colores del bikini, Simanovich está despampanante.