Se cumplen 10 años de aquel gol de Messi en los últimos segundos que convertieron a España en la ganadora del Mundial de Sudáfrica 2010. Sin duda este momento fue el más grande de la competición, pero no el único. Nadie puede olvidar la declaración de Iker Casillas a Sara Carbonero. El guardameta estaba tan eufórico tras alzar la Copa que decidió dar un beso en la boca a la reportero. La periodista, que por aquel entonces cubría la sección de deportes de Informativos Telecinco, no supo como continuar.
Un beso que sorprendió a todos, ya que llevaron su relación en el más estricto secreto. Nadie sabía absolutamente nada. A partir de ese día las cámaras no les dejaron tranquilos. Los medios de comunicación se interesaron por el romance del verano, aunque unas semanas después también fue sonoro el de Gerard Piqué y Shakira.
A la periodista nunca le ha importado hablar de ese momento tan importante en su vida. En la presentación de gafas Polaroid habló de ello tras ser preguntada por la prensa. “Objetivamente, el beso de Iker en el Mundial de Sudáfrica, fue el beso de mi vida. Pero también han habido muchos otros que no han sido frente a una cámara y que también han sido importantes”, declaró la manchega para los micrófonos del programa Arusitys de La Sexta.
Respecto a como compagina su trabajo con ser madre comenta “como muchas madres y mujeres, sacrificando otras cosas. Durmiendo muy poco. Con una corresponsabilidad, en este caso con Iker. Con un poco de ayuda se puede”. “Siempre he dicho que me gustaría un hijo más. Ahora he empezado otra vez con la tele y se ha quedado un poco aparcado”, admitió.
Precisamente de la reacción de sus hijos al beso de su padre a su madre también habló. “Martín se ríe”, comentó, refiriéndose a su hijo de seis años. "Se lo explicas, pero todavía no entiende, está atento pero tampoco llega a comprender”. Lo mismo pasa con Lucas, de cuatro años, que aún es pequeño. “No han vivido de cerca todo eso”, finalizaba Iker Casillas, pues durante el mundial de 2010 sus hijos aún no habían nacido.