Llegan nuevos tiempos para Iker Casillas. El guardameta del Oporto y su mujer, Sara Carbonero, vivieron uno de los peores años de su vida tras el infarto que sufrió el futbolista y el cáncer de ovario de la periodista. La salud de ambos ha mejorado y poco a poco se reincoporan en la medida de lo posible a sus compromisos profesionales. Siempre han mantenido cualquier dato sobre su salud en la más estricta intimidad.
El futbolista ha sido durante estos meses la gran incógnita para muchos medios deportivos. Era muy difícil despejar la X porque la solución al problema solo la tenía él y por fin ha hablado alto y claro. La edad del jugador es complicada para volver al terreno de juego y mucho más después de un año de ausencia. Casillas se encontraba entre la espada y la pared. No se veía sin trabajar, no quería dejar de lado su gran pasión y aunque ya se ha anunciado que cuelga las botas para siempre, está dispuesto a luchar por la presidencia de la Federación.
"Iker Casillas, antes de anunciar su candidatura, vino a Oporto a comer conmigo y comunicarme su decisión de poner fin a su carrera deportiva", confirmó Pinto da Costa en la entrada del Palacio de Justicia. Además, el presidente afianzó su apoyo sobre la figura de Iker, a pesar de la ruptura de su vínculo: "El Oporto ya le ha felicitado y estaba muy feliz. Tenía una actitud que me conmovió mucho".
Durante este tiempo se ha hablado mucho de esta gran duda, pero también de los problemas capilares de Iker Casillas que se solucionaron igual de rápido que los de Rafa Nadal. Ninguno de los dos ha confirmado que se hayan hecho algún injerto de pelo, sin embargo la diferencia es más que notable. Es cierto que ahora el guardameta está mucho más relajado y no tiene unas situaciones de estrés tan fuertes. Pero el pelo caído no se recupera jamás, por lo menos de forma natural.
Se rumoreó en su momento que el guardameta llevaba muy mal la alopecia. El pelo le empezaba a aclarar y eso no le gustaba, Los medios siempre le sacaban fotografías y vídeos y no le gustaba verse con ese aspecto, por eso decidió tomar la medida de implantarse pelo. Iker Casillas fue uno de los primeros famosos en atreverse a someterse a tan revolucionaria técnica.
Él utilizó la técnica FUE. Este método es uno de los más avanzados que existen hoy en día, consistente en extraer de forma individual los folículos pilosos del área donante de la cabeza (occipital y lateral), para después implantarlos en las zonas que había que llenar de cabello. La noticia fue publicada por numerosos medios de comunicación españoles, como el periódico El Mundo o el suplemento La Otra Crónica, haciendo así que muchas personas conocieran a través del trasplante capilar de futbolistas como Iker Casillas, la existencia de estas innovadoras técnicas capilares.