Antonella Roccuzzo está muy feliz con sus pequeños y con la compañía de su pareja, Leo Messi. La argentina no para de publicar fotografías de sus retoños en las redes sociales. Y ni uno cuenta con más publicaciones que otro. Todos tienen su sitio. Durante este año ha publicado más fotografías del pequeño ya que todavía no iba a la guardería y era quién más tiempo pasaba con ella en casa.
Los tres hijos de Leo Messi y Antonella Roccuzzo son muy distintos entre sí. Mateo Messi y Ciro Messi puede que sean los más parecidos físicamente. De momento no se puede definir el carácter del más pequeño, aunque será muy alegre y fotogénico porque no deja de sonreír en las fotos. En cambio, Thiago y Mateo son como la noche y el día. A pesar de ello se quieren con locura. El mayor es mucho más responsable y serio, mientras que el mediano podría protagonizar una película. Mateo, el travieso.
Su cara, su mirada pícara, sus muecas, todos los gestos le definen. Mateo Messi es especial para Antonella Roccuzzo y Leo Messi, especialmente porque es quién más "guerra" les da y con él tienen que tener puestos los cinco sentidos. Messi lo definió como un auténtico trasto.
No hace falta que lo jure. Solo hay que ver las divertidas imágenes y vídeos que enseñan de él por las redes sociales. Tras celebrar un falso gol en las gradas del Camp Nou la semana pasada, Mateo Messi volvió a viralizarse y sus vídeos del pasado vieron de nuevo la luz.
Mateo Messi ha protagonizado grandes momentos en el Instagram de Antonella Roccuzzo. En uno de los vídeos tomó el salón de la casa como un campo de fútbol y chutó la pelota, pero no tuvo el mismo éxito que su padre porque el balón terminó en el móvil de la argentina. Si esas eran sus intenciones eso se llama puntería.
Otro de los momentos que protagonizó fue cuando recibió una batería de regalo de Reyes Magos por parte de Luis Suárez. Menos mal que la familia Messi Roccuzzo no tiene vecinos ni debajo ni al lado porque sino no les dejaría dormir. De momento ya sabemos que no va ni para futbolista ni músico.
También le robó el móvil a su madre mientras estaba despistada. Los niños saben manejar un teléfono inteligente mejor que los adultos y consiguió meterse en Instagram y publicar el mismo su primera stories. Aunque todavía no sabe enfocar muy bien. Mateo da un grito ensordecedor y rápidamente corta la grabación. Le han pillado.