Denis Suárez ya está más que asentado en Londres junto a Nadia Avilés. El futbolista fue cedido del Barça al Arsenal, una noticia agridulce para el gallego y su pareja. De todos modos han mostrado una gran fortaleza y un apoyo mútuo para afrontar esta nueva aventura que parece que no está siendo un gran sueño, más bien una auténtica pesadilla.
El centrocampista lleva unos días aquejándose de unas molestias en la ingle que no le dejan rendir al 100%. Ahora mismo el equipo 'gunner' ve lejos la opción de compra. Desde el pasado 10 de marzo el gallego no ha pisado el terreno de juego. Ni se le espera a corto plazo. Es muy probable que tan solo dos meses después de su llegada deba mudarse a otra ciudad en la próxima temporada. No hace falta que busquen un nuevo hogar en Londres con el hotel en el que están viviendo les sobra. Al jugador solo le queda la opción de apoyar a su equipo desde casa.
Nadia Avilés, la principal culpable del cambio de Denis Suárez
Desde que ha sucedido este cambio Denis Suárez no ha vuelto a ser el mismo. Ha cambiado radicalmente de carácter. Además ya no está centrado en el juego. El gallego solo tiene ojos para Nadia Avilés. Arrogante y crecido, son los adjetivos que utilizan en las redes para describir su personalidad. Algunos seguidores del futbolista creen que su pareja tiene mucho que ver.
Al parecer es su gran influencia y consigue manejarlo a su antojo. Vacaciones aquí, vacaciones allá. En todas partes menos donde tiene que estar. Avilés solo quiere una vida de lujo, tal y como demuestra diariamente en sus redes sociales y estar con el futbolista le ayuda a promocionar su carrera como modelo. El futbolista necesita centrarse mentalmente, sino sus días en el mundo del fútbol están contados.