Raquel Mauri e Ivan Rakitic son la pareja del Barça con una historia de amor más bonita y surrealista. Es una verdadera anécdota. Cuando el futbolista jugaba en el Sevilla se enamoró perdidamente de la camarera del bar del hotel en el que se hospedaba. Ahí vivió hasta que encontró un hogar. Cada mañana bajaba a desayunar e intentaba conocerla un poco más, a pesar de su poca comunicación. Rakitic no sabía mucho castellano todavía. El jugador le acabó pidiendo salir aunque esta se negaba porque era un futbolista y ellos se trasladan de ciudades continuamente, una idea que no le gustaba en absoluto a la sevillana. Al final se enamoraron, tuvieron dos hijas preciosas y en breve puede que vuelvan a hacer las maletas y abandonen la ciudad condal.
Ajeno a los rumores que le colocan fuera del Barça la próxima temporada él intenta brillar como nadie. Si debe irse quiere hacerlo por la puerta grande. Mientras las reuniones entre el Barça y el Inter de Milán no cesan, Rakitic hizo gala de su juego en el FC Barcelona-Espanyol del pasado sábado 30 de marzo. "Tres puntos más", escribió feliz. Desde luego que si se marcha lo hace viviendo uno de los mejores años del club.
En estos momentos tan difíciles, sin lugar a dudas, Raquel Mauri es su mayor apoyo. La sevillana está a su lado en todo momento y eso se nota en las redes sociales donde gritan su amor a los cuatro vientos. Al final esto iba a ser una historia de amor para siempre.
La sevillana publicó una fotografía en blanco y negro donde aparecen los dos muy acaramelados y completamente desnudos metidos en un jacuzzi. Se miran con complicidad y se abrazan. Ella utiliza una de sus manos para taparse los pechos y otra para agarrarse al jugador y demostrarle que nunca le va a soltar. "La mirada es el lenguaje del corazón. Te amo", escribió junto a la imagen. "Y yo más", le contestó inmediatamente Rakitic.
Los mensajes de sus seguidores no tardaron en llegar. Con esta foto habían revolucionado las redes. "Para una portada", escribió una usuaria. "Vaya la foto que no hacen tio", dice un seguidor a otro. "Muy hot", escribe otro.