A principios de 2016 , la vida de la familia Messi Roccuzzo cambió por completo y para siempre. Un dogo de Burdeos conquistó el corazón del futbolista argentino. En poco más de ocho meses en can llegó a pesar unos 50 kilos y a medir incluso más que sus hijos.
Durante estos dos años Hulk se hizo un hueco en la vida de Messi, como uno más. En numerosas ocasiones el futbolista y Antonella han mostrado orgullosos a Hulk en sus redes sociales.
Leo Messi juega con su perro, Hulk
En la gran casa del astro argentino el can está a sus anchas y a veces entrena con su dueño.
Para Messi la familia es mucho más importante que el fútbol, a pesar de su devoción, y en ello se incluye también Hulk.
El futbolista publicó en su cuenta de Instagram varias fotografías con sus hijos y el gran Hulk. Encima del sofá, uno encima de otro y el can en el suelo, estirado. Mide casi más que ellos. En la siguiente, sus hijos se ríen cuando Hulk besa con su lengua la nariz de Messi. Y en la última solo Hulk y Messi, como si fuesen uno. Dos grandes en una misma foto.
La foto enamoró rápidamente a los seguidores del futbolista. Más de siete millones de corazones, una de sus fotos más aplaudida y comentada. El verdadero significado de familia.
Messi no se imagina una vida sin Hulk. El pequeño cachorro ocupó un hueco en su corazón desde el primer segundo que ambos se miraron a los ojos.