Leo Messi está hecho todo un padrazo. El argentino vive el fútbol como su principal pasión, pero con el paso de los años también ha encontrado en su familia otra perspectiva de la felicidad verdadera que le ha hecho madurar como persona y jugador.

Horas antes del derbi y a la espera del entrenamiento en la Ciutat Esportiva, el argentino compartió una imagen con dos de sus tres pequeños en casa aprovechando la festividad de diciembre y la presencia de sus hijos en casa en pleno viernes. La fotografía cautivó a sus seguidores que como no podía de ser de otra forma tuvo una fotógrafa muy especial: Antonella Rocuzzo. 

Messi posó feliz junto a Thiago y Mateo en un abrazo de tres en el salón de su casa. 

Una foto con tres protagonistas que primero compartió en sus stories, pero que más tarde decidió subir a su muro de Instagram que refleja a la perfección el amor de Leo por su familia.