Leo Messi y Antonella Roccuzzo llevan casi toda una vida juntos. El matrimonio, que ya cuenta con tres hijos, vive felizmente en Barcelona, pero antes de que Messi se consagrara como el mejor futbolista de la historia tuvo algunas restricciones deportivas y extradeportivas que marcaron, para bien, su carrera profesional y vida personal.
Dani El Rojo, chófer de Leo Messi del 2005 al 2007, desveló en una entrevista para el programa de TVE El Rondo algunos de los detalles más curiosos de la vida personal del capitán azulgrana que marcaron definitivamente una vida llena de éxitos.
Humildad por los poros
"Leo es una persona sencilla, tal y cómo le vemos: un tío muy humilde, todo lo contrario a un juerguista", explicó Dani. Una descripción que ha sido repetida por muchos que conocen al astro argentino en la que ahondó algo más: "Lo primero que me dijeron es que no nos dejaban que una mujer entrara. El padre me lo dijo, que ninguna chica le tocara. Primero, porque él estaba reservado para Antonella y punto. Era su novia y no quería nada más. Y, de juergas, ninguna".
Unas declaraciones que coinciden con el amor que Messi profesa a su esposa con la que lleva más de una década saliendo. Asimismo, también reconoció que en sus primeros años en el primer equipo del Barça, cuando Frank Rijkaard estaba al mando del vestuario, algunos jugadores eran una mala influencia. "No le dejaban ir con algunos jugadores, porque el momento futbolístico era muy bueno, pero un poco desmadrado en otros aspectos".
Una foto de Leo con su anillo de casado / FCB
Fin de su relación laboral
Dani El Rojo terminó su vinculación laboral con Leo cuando ganó su cuarto Balón de Oro tras ejercer otras funciones como ,la protección personal del jugador. Le acusaron de haber atracado más de 500 bancos en una campaña que el considera que se realizó para atacar a Messi y a su entorno.
Ahora, ambos tienen una relación de amistad y han cenado en varias ocasiones juntos en lo que el comprende como la personalidad d de Messi, siempre cercano y humilde.