Jordi Alba y Romarey Ventura han encontrado la excusa perfecta para viajar a la ciudad del amor, París. La ausencia del lateral en el combinado nacional, la segunda desde que Luis Enrique es seleccionador, no gusta al de L'Hospitalet, pero poco puede hacer para cambiar la opinión de Lucho más que mantener su nivel en el verde.
Mientras toda España se cuestiona su ausencia en la Roja, Alba ha aprovechado sus días de descanso para viajar junto a su pareja y unos amigos a París. Sin su primogénito, la pareja ha vuelto a mostrar su pasión y amor en una de las fotos más tiernas hasta ahora: un beso iluminado por las luces de la Torre Eiffel.
Unas minivacaciones en las que la pareja han querido tomarse un descanso como papás para pasar un tiempo a solas en la ciudad que combina a la perfección con su constante idilio de amor.