Arturo Vidal y Maria Teresa Matus viven momentos delicados. El fichaje del chileno por el FC Barcelona se hizo oficial el tres de agosto de 2018 después de que el club catalán abonara 20 millones de euros al Bayern de Munich. El Barça por fin se hacía con un centrocampista físico e imponente para una medular que requiere de músculo para los partidos europeos. 

Tras casi dos meses bajo las órdenes de Ernesto Valverde, el centrocampista todavía no se ha adaptado a la perfección al juego azulgrana, pero la evolución del jugador es positiva y el equipo técnico valora con optimismo su proyección. Aun así, el futbolista no está contento con su poco protagonsimo y además, podría haber factores extradeportivos que podrían estar menguando el rendimiento del chileno. 

Inestabilidad emocional

Hasta la fecha se desconoce de forma oficial si Arturo Vidal continúa con su mujer o qué tipo de relación vivirían en este momento con la que lleva compartiendo más de una década. De momento, la pareja no ha hecho ningún comunicado oficial, pero los rumores sobre un posible divorcio no cesan, especialmente en el país de origen de la pareja. 

Varios medios de comunicación apuntan a que la pareja ya no mantendría una relación amorosa. De hecho, tras su fichaje por el Barça, Arturo se mudó a Barcelona pero Marité, tal y como se la conoce en su circulo cercano de amigos, continuaría en Alemania junto a los tres hijos de la pareja. 

Una década de amor

Ambos se conocieron en 2008 cuando el chileno daba sus primeros pasos como futbolista profesional en Bayern Leverkusen. Marité puso punto y final a la relación que mantenía con el exbailaróin Demis Reyes para empezar una nueva con Arturo. Desde entonces, la pareja ha sido una de las más estables del mundo del fútbol. Contrajeron matrimonio por la vía civil en 2009 en Chile, en el Club Hípico de Santiago de Chile, con contados invitados y en 2014 volvieron a celebrar en enlace por la iglesia en el mismo lugar con más de 500 testigos. 

Pese a la gran boda chilena, ambos siempre han mantenido a sus hijos y su relación fuera de los focos mediáticos. Marité y sus tres hijos, Alonso (Monete), Elisabetta y Emiliano, siempre han acompañado al futbolista en sus aventuras profesionales por Europa -- Juventus de Turín y Bayern Múnich -- pero no habría ocurrido lo mismo esta vez con su cambio de destino a Barcelona.

 

Algo ha cambiado en la relación de la pareja, aunque no sería un divorcio. La modelo publicó hace dos semanas en su cuenta de Instagram  besando a Arturo con un mensaje claro: "Nunca hay de preocuparse de lo que piensa la gente, la vida es tuya. Tienes que vivir cada momento como si fuera él último". Unas palabras que invitan a la especulación. 

Marité podría estar acallando los rumores de la prensa chilena sobre su separación.