Imagen de archivo de una detención / EP

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Sucesos

Un hombre condenado a 28 años de cárcel por abusar de sus dos hijas desde que tenían cuatro años

El padre aprovechaba cuando no había nadie de la familia cerca para obligarles a que le hicieran tocamientos sexuales

27 septiembre, 2022 14:13

Un hombre ha sido acusado de abusar sexualmente de sus dos hijas menores de edad y maltratar a una de ellas. En concreto, la fiscalía de Castellón solicita 28 años y medio de prisión para el acusado. El agresor se sentará en el banquillo el próximo viernes 30 de septiembre en el juicio que celebrará la Sección Primera de la Audiencia Provincial para aclarar el veredicto. 

Los hechos a denunciar datan del año 2005, cuando el padre tenía 23 años y la mayor de sus hijas tan solo tenía cuatro. Esos abusos se prolongaron hasta el año 2017, cuando la joven cumplió los 16 años. Tal y como mantiene la acusación pública, el hombre aprovechaba los momentos en los que se quedaban a solas para "someterla a todo tipo de actos de naturaleza sexual".

Cuando no había nadie

Además, amenazaba a su propia hija con golpearla si lo contaba a alguien o si no accedía a acostarse con ella. Pero no solo eso, sino que también impedía ajo amenazas o violencia física, que la víctima estudiara y se relacionara con compañeros de su misma edad, "espiándola continuamente y persiguiéndola para saber qué hacía".

El hombre utilizó el mismo modus operandi con la menor de sus hijas, desde que la pequeña tenía seis años hasta que cumplió los once. "Su padre le requería para que le tocara los genitales y le realizó tocamientos a la menor en los genitales por encima de la ropa", aseguran desde la acusación. 

Penas de cárcel

Es por todo ello que lo acusan de dos delitos continuados de abuso sexual a menor de edad y un delito de maltrato habitual. Las penas de estas acusaciones suman entre 15 y 11 años de prisión por los delitos de abuso sexual a sus propias hijas y una pena de cárcel de dos años y medio por el delito de maltrato habitual.

Asimismo, el fiscal considera la imposición de órdenes de alejamiento de sus dos hijas por 20 y 16 años, así como la libertad vigilada por 10 y ocho años. Respecto de la menor de las víctimas, el fiscal también interesa que se le prive de la patria potestad, mientras que les tendrá que indemnizar con 50.000 euros a la menor y 15.000 a la pequeña