Indignación en las redes por el vídeo que ha difundido una usuaria del metro de Barcelona con movilidad reducida. Montse Quílez ha denunciado la falta de solidaridad, educación y empatía que han tenido el resto de viajeros que se encontraban en la parada de Vall d’Hebron al ver que ella iba en silla de ruedas.
Según recoge El Periódico, la mujer esperaba la llegada del ascensor para subir al vestíbulo principal. Con todo, ninguno de los allí presentes se ha ofrecido a cederle el sitio, aun sabiendo que es ella quien tiene prioridad dadas sus circunstancias y limitaciones físicas.
La denuncia de Montse a través de TikTok
En la secuencia que ha colgado en TikTok se puede ver como el resto de los viajeros esperan en la cola, mientras ella parece ser invisible para todos ellos. A su vez, Quílez se pregunta cuántos de ellos le cederán el paso. A juzgar por las imágenes, la respuesta a su pregunta es clara.
"Ninguno, ya lo veréis. Voy en silla de ruedas y para ellos soy invisible", ha lamentado ante la impasibilidad de los allí presentes. "Ahora hay que subir por este ascensor infernal que siempre hay que esperar un montón de rato", ha seguido.
Una situación a la que se enfrenta a diario
Finalmente, y después de que ninguno de los usuarios haya tenido un gesto de civismo con ella, la mujer se ha subido en el ascensor. Al salir, ha deseado un irónico “buen viaje” al resto de pasajeros."Ahí queda la mala educación de las personas”, ha afirmado.
Y es que según ha revelado, este es el tipo de situaciones a las que debe enfrentarse cada día nada más salir de casa: “La gente no priorizan ni las sillas de ruedas, ni las personas mayores, ni tampoco las personas que van con una muleta o con un carrito. No había ni carrito ni nada, estaba yo sola”.