Los múltiples atentados, reivindicados por el ISIS, del pasado jueves 26 de agosto en Kabul (Afganistán) se saldaban con más de 170 fallecidos: 13 de ellos, soldados estadounidenses, entre los que se encontraba Nicole Gee de tan solo 23 años:
Días antes de perder la vida, esta joven soldado se convertía en la protagonista de unas instantáneas que difundía el Departamento de Defensa del país norteamericano al acunar en brazos a un bebé mientras se llevan a cabo las maniobras de evacuación en la capital afgana.
Amo a mi trabajo
“Miembros del servicio militar estadounidense consuelan a bebés en el aeropuerto internacional Hamid Karzai en Kabul, Afganistan”, rezaba el post en redes. En cuestión de minutos, las imágenes se viralizaron en Internet. De hecho, fue la propia Nicole quien compartía las fotografías en su perfil de Instagram.
“Amo a mi trabajo”, escribió la malograda. Sin embargo, este no fue el último mensaje que difundió durante el despliegue del Ejército estadounidense en el país asiático. Tan solo 72 horas antes de su muerte, la sargento publicaba la que sería su última fotografía: “Aeropuerto de Kabul. Escoltando los evacuados al avión”.
Su última publicación
Se trata de una instantánea, tomada el 22 de agosto, a pie de pista. Nicole, con un rifle en la mano, y con su uniforme militar, acompaña a los centenares de afganos que huían de su país ante el avance de las tropas talibanes.
La historia de esta joven ha conmocionado al mundo. Su perfil acumula más de 43.000 seguidores y miles de internautas rinden homenaje a su labor: “¡Cada niña que sueña con ayudar a los demás escuchará tu nombre! ¡Descansa, hermosa! ¡Gracias por su servicio y por ser una inspiración!” o “Gracias por su servicio a este país. Descansa tranquila Nicole”, son tan solo una muestra de ello.