Una cucaracha, en una imagen de archivo / CREATIVE COMMONS

Una cucaracha, en una imagen de archivo / CREATIVE COMMONS

Sucesos

Una mujer vivió con una cucaracha en su oído durante nueve días

Un doctor tuvo que matar con lidocaína al insecto y extraer del conducto auditivo con unas pinzas los restos

7 mayo, 2018 13:24

Tener una cucaracha en el interior de la oreja durante 9 días puede ser una experiencia que pocas personas querrían vivir. Katie Holley, una mujer de Florida, Estados Unidos, ha experimentado dicha sensación y ha visto como el insecto permaneció en su canal auditivo durante más de una semana hasta que consiguió expulsarla.

Holley se despertó en medio de una noche sintiendo algo extraño en su oído izquierdo “como si alguien hubiera metido un pedazo de hielo”, explicaba a la revista Self. Su marido intentó extraer sin éxito lo que se encontraba en su oreja utilizado una pinzas. Fue entonces cuando decidieron acudir a los servicios de emergencias. Allí, un doctor les informó de que era una cucaracha lo que había en el oído de la mujer. Para sacarla de ahí tuvieron que aplicar lidocaína para matarla y posteriormente sacarla con pinzas.

La oreja de una persona en una imagen de archivo /Creative Commons

La oreja de una persona en una imagen de archivo /Creative Commons

La oreja de una persona en una imagen de archivo / CREATIVE COMMONS

Insectos en las orejas, algo común

Pese a la intervención médica, Holley continuó sintiendo molestias en el oído hasta 9 días después. Fue entonces cuando descubrieron que aún tenía partes de la cucaracha en el conducto auditivo. Incluyendo la cabeza del insecto. Por suerte o por desgracia, la desagradable sensación de tener insectos en el oído es más común de lo que se podría creer, según explicaron varios médicos en el artículo de Self.

El Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos ofrece varias recomendaciones si se da el caso de que un insecto penetre en el oído. Una opción es tratar de colocar la oreja de tal manera que mire hacia arriba con la esperanza de que el insecto vuele o escale hacia fuera. Otra alternativa es verter un poco de aceite mineral, de oliva o de bebé para ahogar al animal y permitir que salga. Además, acudir al médico debe ser prioridad, pues si permanecen partes del insecto en el oído estas pueden provocar infecciones y molestias.