Integrantes del grupo musical Els Amics de les Arts / LUIS MIGUEL AÑÓN

Integrantes del grupo musical Els Amics de les Arts / LUIS MIGUEL AÑÓN

Famosos

Els Amics de les Arts: "Hemos podido viajar por el mundo cantando en catalán"

El grupo musical celebra la mayoría de edad en el sector con el lanzamiento de su disco de estudio 'Allà on volia'

3 abril, 2023 00:00

Els Amics de les Arts cumple 18 años en la industria musical con el estreno de su último disco, Allà on volia. El trío formado por Daniel Alegret, Joan Enric Barceló y Ferran Piqué radiografía a través de ocho nuevas canciones su momento vital con un sonido sencillo que se desmarca de las etiquetas y los géneros. El álbum relata la distancia que hay entre lo que somos y el deseo de lo que queremos ser o lo que queremos que crean que somos y cuenta con colaboraciones de artistas como Eva Amaral, Andrea Motis y el pianista Marco Mezquida.

El disco hace un recorrido por ocho historias vitalistas, entre las que se encuentran un antihomenaje en las redes sociales, una noche de fiesta pasados los 30, una canción de amor y más de una reflexión sobre la necesidad de mirar cara a cara a la contradicción para poder aceptarse. "Hay veces que te marcas un objetivo que es inalcanzable. Todo es demasiado corto en la vida como para no reenfocarte rápido y moverte unos grados hacia la derecha o izquierda para conseguir otra cosa. Incluso pararte a ver dónde estás y dónde has llegado", explica la banda en un encuentro con Crónica Directo.

--Pregunta: ¿Cómo ha sido el recibimiento del disco?

--Respuesta: Siempre que sacas un disco sabes que a estas alturas hay gente que lo espera. De hecho, antes de sacarlo había varios conciertos que se habían vendido las entradas y habíamos hecho preventa y sabíamos que más de 1.200 personas lo estaban esperando. No somos ingenuos, sabíamos que había expectación. Igualmente, hasta que no lo sacas no sabes cómo lo recibirá la gente. Con todos los mensajes y las analíticas de las plataformas, si lo comparamos con los anteriores, podemos ver que está yendo mejor que los últimos discos. Después de 18 años de carrera, saber que todavía hay gente al otro lado esperando para escuchar las canciones y venir a los conciertos es un regalo.

--¿Todavía sienten nervios y miedo antes de lanzar canciones?

--Hay mucha gente que nos quiere y eso es muy bueno. Que vendas discos o entradas es un síntoma de que la gente cree en lo que has hecho y espera que lo que puedas ofrecerle será bueno. Se trata de que cada paso que das no sea extraño y no despistes mucho a la gente. A nuestro seguidor le gusta mucho que experimentemos, que probemos cosas y que nos flipemos un poco con cada disco. También que les contemos un producto de proximidad. Somos como tenderos que estamos en la parada y explicamos el producto. A la gente le gusta mucho la historia detrás del disco.

Dani Alegret, integrante del grupo musical Els Amics de les Arts durante la entrevista con Crónica Directo / LUIS MIGUEL AÑÓN

Dani Alegret, integrante del grupo musical Els Amics de les Arts durante la entrevista con Crónica Directo / LUIS MIGUEL AÑÓN

--¿Cuándo nace el disco?

--No tenemos una fecha en la cabeza porque el proceso de trabajo, sobre todo después de la pandemia, ha sido muy continuado. Estábamos acostumbrados a trabajar de forma más estacional. Hacíamos un disco, parábamos de crear y hacíamos gira, acabábamos la gira y volvíamos. Desde la pandemia no hemos dejado de trabajar porque nunca sabes qué podrá pasar después. Hicimos la gira anterior mientras acabábamos de hacer cosas del musical Pares normals y mientras empezábamos a trabajar en otras canciones que debían representar ese disco. Quizás al principio había como unas 30 canciones, grabamos unas 16 y al final vimos que había ocho canciones donde los personajes tenían un nexo común y todos estaban en torno a este concepto de gente que se debate si está o no donde quiere. Ha sido una elección a nivel de concepto y no de estilo o sonoridad.

--Haciendo referencia al título del disco, ¿se podría decir que están donde quieren estar?

--Estamos más allá de donde queríamos estar. Sí que es verdad que cuando éramos adolescentes teníamos la fantasía de poder subir a algún escenario y dar conciertos ante mucha gente. Todo esto ya lo hemos conseguido y ha sido brutal. Pero esto no es lo que realmente acabas valorando como objetivo final, sino que le das valor a que llevamos 18 años haciendo esto, hemos podido viajar por el mundo cantando en catalán y todavía somos amigos, todavía amamos lo que hacemos. El personaje de la canción se da cuenta de que hay veces que te marcas un objetivo que es inalcanzable. Todo es demasiado corto en la vida como para no reenfocarte rápido y moverte unos grados hacia la derecha o izquierda para conseguir esa otra cosa. Incluso pararte a ver dónde estás y dónde has llegado. Los objetivos muchas veces son como el horizonte, tú caminas y más se aleja.

--¿En 18 años se han tenido que reenfocar mucho?

--Somos de mirar hacia adelante y avanzar. Sí es verdad que al principio cuando no nos escuchaba nadie tampoco te hacías mala sangre, pensábamos que todavía no estábamos donde queríamos, pero no tirábamos la toalla, seguíamos adelante. Hasta que un día de repente comienza a aparecer gente en los conciertos y es como un pequeño milagro. Nunca nos hemos frustrado mucho. Quizás en el 2020 cuando cayó la gira y el disco fue un momento en que tú esperas una serie de cosas y la realidad te pega un guantazo. Pero reenfocas.

Joan Enric Barceló, integrante del grupo musical Els Amics de les Arts durante la entrevista con Crónica Directo / LUIS MIGUEL AÑÓN

Joan Enric Barceló, integrante del grupo musical Els Amics de les Arts durante la entrevista con Crónica Directo / LUIS MIGUEL AÑÓN

--¿Cómo han encontrado su estilo a nivel de sonido?

--Esta vez hemos optado por jugar con el mismo número de elementos, pero siendo más minimalistas. No todo el mundo tocando todo a la vez, sino intentando ver lo que pedía cada canción. Esto hace que muchas canciones como La nit sembla que serà nostra tengan un paisaje muy expansivo y con muchas voces, y de repente pasas a un pasaje mucho más minimalista con una batería, un piano y una voz. Jugar con muchos elementos, pero pocos a la vez. Esto nos ha dado una idea o un camino para empezar. Cuando estábamos cargando el disco de sonidos dábamos un paso atrás y nos dimos cuenta de que también funciona. Menos, a veces, es más.

--Podrían haber hecho su música de siempre, ¿por qué deciden arriesgar?

--Precisamente a nosotros en concreto nos motiva. Somos tres culos inquietos y llevamos desde que nos dedicamos a esto cada año formándonos de algún modo, aprendiendo y escuchando música nueva. Todo lo que escuchas nuevo que te motiva de alguna forma consciente o inconscientemente lo acabas llevando hacia tu terreno. De hecho, si escuchas nuestros primeros álbumes y el nuestro actual, salvo el tema de las voces, el cambio es sustancial. Con esto no renegamos del pasado y nos gusta mucho lo que hicimos porque gracias a esto estamos hoy aquí, pero ir cambiando y aprendiendo es positivo. Y te diré más, creo que el seguidor lo agradece. Al menos nuestro seguidor nos da mucha manga ancha para ser más traviesos, hacer más experimentos y probar cosas distintas.

--¿Cómo surge la colaboración con Marco Mezquida, un pianista de jazz?

--El mundo de la cultura pop normalmente no dialoga tanto con el mundo del jazz, pero en ese caso fue una gran casualidad. Estábamos viendo un concierto de Brad Mehldau, Marco Mezquida estaba en el público y nos presentamos. La sorpresa fue que dijo que le interesa mucho lo que hacemos y que hiciéramos un día algo juntos. Le enviamos una canción que los tres vimos que podía encajar porque quería un solo al final y enseguida dijo que le encantaba y que se apuntaba.

Ferran Piqué, integrante del grupo musical Els Amics de les Arts durante la entrevista con Crónica Directo / LUIS MIGUEL AÑÓN

Ferran Piqué, integrante del grupo musical Els Amics de les Arts durante la entrevista con Crónica Directo / LUIS MIGUEL AÑÓN

--¿Por qué le escogieron para esa canción?

--Le explicamos que la canción habla de cómo las redes están ocupando un espacio tan importante en nuestra vida, que se está confundiendo la realidad con la ficción y todo el mundo quiere parecer lo que no es para tener más seguidores. Recuerdo que le dijimos esa sensación de tormenta de datos, de información arriba y abajo, y es como el solo que compuso. Son todas las notas que coloca él como una especie de mar que te pasa por encima y deja medio KO.

--¿Cómo llevan la repercusión en redes?

--Todos queremos publicar algo y que la gente nos diga que está muy bien. Esto que te da el hecho de tener un like es algo muy inmediato. Antes tú vendías un disco y el feedback no era tan inmediato, ahora es cuestión de segundos saberlo. Cuando sale un disco estamos bastante pendientes de lo que ocurre y lo que dice la gente. A partir de ahí, cualquier comentario muy bueno podemos responder, uno bueno podemos hacer un like y el malo no lo contestamos. Responder es el mayor error. No estás hablando con una persona, hablas con un perfil. Hay una distancia que es imposible de salvar y tampoco quiere llegar a un punto de entendimiento ni tiene ninguna necesidad. Podemos decir muy orgullosamente que desde 2005 no hemos contestado ningún comentario negativo y ya no nos los compartimos entre nosotros. Y somos más felices.

--No creo que tengan muchos ‘haters’...

--Todo el mundo que es alguien tiene. Sobre todo, en Twitter, que es la red reina de esto y una forma de destacar. Todo el mundo quiere sentirse único y necesita tener una opinión única. Cuando te expresas delante de la gente, te posicionas diciendo lo que te gusta y lo que no te gusta, todo el mundo lo hace. A la que eres alguien importante, la gente se posiciona más cerca o más lejos. A mí nunca se me ocurriría escribir algo negativo sobre algo artístico, porque si no me gusta estoy en mi derecho, pero hacerlo público no tiene mucho sentido a menos que sea constructivo. Nunca hay que alimentar a los troles.

--Colaboran con Eva Amaral, ¿cómo surgió?

--Ella lo tuvo claro. Nuestra idea era encontrar a alguien de nuestra generación que pudiera entender lo que cuenta la canción, que pudiera sentirse identificado con uno de esos personajes que, alrededor de los 40, deciden salir de fiesta, que no es algo que la gente de 40 años hacemos cada semana. Este hecho es lo que marca la canción y necesitábamos a alguien de nuestra generación que nos acompañara a cantar esto y que pudiera entender que es esa sensación de llegar a una discoteca o a un bar musical y encontrarlo. Tiene este choque cultural, con gente de otra edad, en dos mundos que chocan. Nosotros cuando salíamos con 20 años cantábamos Amaral y decidimos enviarle la canción. En una semana nos contestó, nos dijo que se sentía muy identificada, que quería hacerlo y que lo haría en catalán.

Retrato en las instalaciones de Crónica Directo del grupo musical Els Amics de les Arts / LUIS MIGUEL AÑÓN

Retrato en las instalaciones de Crónica Directo del grupo musical Els Amics de les Arts / LUIS MIGUEL AÑÓN

--Autoeditan su disco, ¿cómo ha sido la experiencia?

--Es volver al punto de inicio. En 2008 sacamos el primer disco autoeditado y, después de un período por discográficas aprendiendo de todas, hemos estado mirando cómo funcionan, viendo cosas buenas, cosas malas, tenemos buena relación creo que con todas las que hemos estado, hemos ido siempre cumpliendo con el contrato, pero llegó un punto de querer hacerlo nosotros. Hoy el consumo que se hace de música a través de las tiendas no llega tanto, es todo streaming, y lo poco que se puede hacer para enviarlo al seguidor podemos hacerlo nosotros. Nos pareció que tendríamos un control total de la gestión, de cómo se hacía, la producción, dónde íbamos… y artísticamente no tienes a nadie, lo decidimos absolutamente todo nosotros.

--¿Imponen mucho las discográficas?

--Lo que te dicen tiene mucho peso porque tú no estás presente cuando te presentan en la radio y siguen una estrategia a tener en cuenta. Ellos hacen su estudio de cuál es la buena para poder salir a tope y te lo tienes que creer porque si los contratas para que te saquen el disco debes hacerles caso. Eso sí, siempre puedes no estar de acuerdo y que exista un debate.