La cantante Alaska, licenciada sin acabar la carrera /EP

La cantante Alaska, licenciada sin acabar la carrera /EP

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Alaska: "Sigo siendo la triste licenciada que nunca termina la carrera"

La cantante asegura que pasa de las etiquetas que puedan ponerle los usuarios de las redes sociales y acusa a la prensa de magnificar hechos que no tienen importancia

24 abril, 2022 19:00

María Olvido Gara Jova (1963), más conocida como Alaska, es una cantante, actriz, compositora, presentadora, empresaria, escritora, productora y filántropa. Nació y se crio en Ciudad de México, donde pasó sus 10 primeros años; después se mudó a España junto con su familia. Aquí, se unió como guitarrista al grupo Kaka de Luxe. En 1979 se convirtió en la vocalista y compositora de Alaska y los Pegamoides, banda con la que alcanzó un número uno con el tema Bailando. Luego le seguirían muchos más hasta convertirse en la denominada reina de la movida. De hecho, sus éxitos todavía hoy siguen sonando con fuerza casi 30 años después.

Desde 1989 forma parte de Fangoria, banda musical que lidera junto a Nacho Canut, su inseparable compañero que la acompaña desde sus inicios en la industria de la música. Ambos presentan este 2022 Edificaciones Paganas. Se trata del segundo EP que han sacado tras Existencialismo Pop, y que forma parte de la serie de tres trabajos que se propusieron grabar a principios del 2020. De ello, del concierto de este domingo 24 de abril en el Club Sant Jordi, en el marco del Festival Mil·leni, de su vida y de su trayectoria habla en esta entrevista con Crónica Directo.

--Pregunta: 'Edificaciones Paganas'. ¿Qué significa el nombre?, ¿de qué nace? ¿Cómo definiría el nuevo estilo musical de Fangoria?

--Respuesta: Lo que estamos sacando desde después del confinamiento son EP, discos de media duración con cinco canciones. Hemos jugado con eso de los EP en los títulos. Yo no hablaría de nuevo estilo musical, no creo que lo tengamos. En cada disco jugamos con distintos estilos, a veces vamos más atrás en el tiempo a la hora de buscar los sonidos. Otras, vamos más por las influencias que suenan en ese momento.

--Una pandemia que ha sido el azote para el sector. ¿Cómo se sale a flote?

--Nosotros decidimos volver a los escenarios el año pasado contra todo pronóstico. Nos fue bastante bien. No hicimos un formato más reducido para presentarnos ante el público como nos aconsejaban, el público no tenía la culpa de eso que estábamos viviendo. Si uno va a actuar, va con todas las consecuencias. El concierto que daremos en el Festival Mil·leni, este domingo en Barcelona, lo llevamos arrastrando desde abril de 2020. Este nuevo concierto será una miscelánea de nuevas canciones. Tocaremos canciones de los tres últimos discos, pero será un repertorio más variado.

--¿Cómo cree que se está llevando a cabo la recuperación de la actividad en el sector?

--Las perspectivas son muy buenas para los próximos meses, pero me da terror hablar de perspectivas. Parece que a todo el mundo le va a ir muy bien, veremos a ver qué pasa, pero parece que los conciertos serán como los de antes, no como el año pasado que tocábamos con sillas vacías entre los asistentes y con mascarillas.

--¿Quién es Olvido Gara y quién es Alaska? ¿Quién es la licenciada en Historia y Antropología y quién la artista?

--No hay diferencia, ya te lo digo. No soy licenciada, sigo siendo la triste estudiante que nunca termina la carrera (ríe). Solo me hace falta tener tiempo.

--Más de tres décadas en la música. ¿Qué cree que ha cambiado? ¿Ha irrumpido realmente el feminismo en la industria?

--La industria sí que ha cambiado, como todas. Las discográficas, los soportes donde la gente consume sus discos son otros, pero eso no quiere decir que la vida del artista cantante haya cambiado. Al menos, en mi caso no ha cambiado, aunque la música no para de evolucionar. Desde que tengo uso de razón hago una especie de línea continua entre el jazz, el rock and roll, la música pop de los 60, el rock de los 60 y 70, el punk, el glam, la discomusic, la música electrónica y finalmente todo eso fusionado en lo que hoy es mayoritario, eso llamado genéricamente reguetón y que no es solo reguetón, hay muchas cosas. Respecto al feminismo, no sé qué contestar a eso. Nunca lo he visto desde esa perspectiva. Siempre ha habido cantantes, chicas haciendo música y me imagino que eso seguirá siendo así.

--¿Prefiere el antes o el ahora?

--Mientras la gente lea, escuche o vea lo que quiere soy incapaz de juzgar ningún tipo de soporte.

--¿Cuál es su ‘Burbuja vital’?

--Una burbuja vital eres tú estudiando la carrera qué quieres, leyendo los libros que quieres, así como tú pasando los ratos que pasas con la gente que decides compartir tu vida. Tener esas burbujas vitales es muy importante. Es algo que te salva mucho de las realidades del exterior.

--¿Se aísla en ella de todo lo que dicen de usted en la calle, en las redes…: "Persona de derechas, comprometida con el movimiento LGTBI"?

--Se te puede etiquetar de cualquier cosa. De feo, de gordo, de guapo… Antes era la crítica de un periodista con un nombre y apellido, que supuestamente tenía unos fundamentos, que tampoco, ya te lo digo. Ahora es lo que se le ocurre decir a cada persona. La única opción para aislarte ahora sería no tener redes sociales y no tener amigos que vengan a contártelo. Lo importante es tener unas bases sólidas y saber lo que tú eres y que te importe una mierda lo que digan los demás, que encima no te conocen.

--A quién le importa…

--Pues sí, claro, es que creo que estás hablando con las personas que grabaron esas canciones en el 86 (ríe).

--Hablando de redes, este año ha presentado el Benidorm Fest. ¿Cómo resumiría la experiencia? ¿Qué le parece el tema que representará España? ¿Qué opina del ‘pressing’ que ha sufrido Chanel?

--Fantástica. Ya lo había hecho anteriormente cuando no se llamaba Benidorm Fest y eran las galas de selección del participante de Eurovisión. Debo decir que lo haría una y mil veces porque me encanta Eurovisión, me encanta la tele y me encanta presentar. Hay muchas Eurovisiones, el tema de Chanel se enmarca dentro de esa Eurovisión más bailable y es impecable. No le daría ningún consejo, porque yo tengo otra edad y vivo las redes sociales de otra forma. No puedo dar consejos de nada a nadie, en general puedo decir que no se fije en lo que dicen, pero luego es imposible porque la prensa lo multiplica por 10. Si vosotros no recogierais los cotilleos de redes como noticias de periódicos esto no ocurriría.

--¿Cuál cree que será el resultado de Chanel? ¿Puede ganar?

--Es imposible saberlo. Lo que le va a la canción es la intérprete, pero todos sabemos de esas cuestiones que se escapan a la cosa musical. Cómo se caen de bien los países del este entre sí, como se votan entre sí. Todo eso se escapa de lo que es el tema y la puesta en escena.

--¿Televisión o escenarios? ¿Se veía algún día presentando ‘Cine de Barrio’?

--Me encantan las dos. Nunca, fue el mayor regalo de mi vida. Si nos lo hubieran dicho a los Pegamoides en 1982 nos hubiéramos vuelto locos, completamente locos de alegría, pero llegó más tarde.

--¿Volvería a grabar su propio ‘reality’ con Mario Vaquerizo? ¿Cómo es su día a día con él?

--Mil veces, si no no sería reality. Sería un fake reality. Es divertidísimo. Nuestro día a día es todo lo que se ve y lo que no se ve. Mario es divertido, intenso, es de todo. A mí me hubiera gustado ver realities de todo el mundo. Todo el mundo tiene un reality.

--‘Celebrar es ganar’, ponen letra al himno de la Copa del Rey. ¿Cómo surge la iniciativa?

--Surge por parte de la Federación. Fue otra sorpresa porque pensar en dos personas como nosotros, precisamente que no somos el estereotipo que se asocia al deporte, a una competición de fútbol, para estar ahí, para actuar en la final y para hacer este himno, es maravilloso. Hay que romper estereotipos. En países que nos llevan mucho adelanto cuanto a estas cosas está claro que deporte y música van de la mano y forman un gran espectáculo. Espero que sirva de precedente. El tema define lo que es la Copa del Rey, te presentas y tú estás ahí. No todo es ganar, hacerlo y estar ya es suficiente, por eso celebrar es ganar. El hecho de estar ya es ganar.

--Se ve participando en algún otro formato de televisión?

--Soy cero aventurera, cero lanzada. En un reality sería un mueble, yo no doy una voz más alta que otra, no me meto en peleas, sencillamente desaparezco en mí misma. De hecho, sería el gran mueble de todos los realities. Luego hay programas que son muy exigentes como El Desafío, tuve a Mario ensayando tres semanas seguidas su reto, tocando la máquina de escribir para las pruebas. Eso fue una participación, imagínate cada semana. Igual que en Masterchef, que es súper exigente.

--¿Piensa en la jubilación?

--Yo mi vida no la vivo como un trabajo. Ni tengo jubilación ni pensión ni nada. Dependerá únicamente de las ganas, y creo que las ganas no van a decaer con la edad, siempre que el cuerpo y la cabeza acompañen. Aunque eso no lo sabemos.