Joana Sanz no puede más. La modelo ha compartido en su perfil de Instagram un comunicado en el que informa a todos sus seguidores que desaparece de las redes sociales para evitar seguir estando en el foco mediático tras la polémica con su exmarido, Dani Alves.

La influencer se ha mostrado de lo más sincera y ha asegurado que no puede seguir con la presión mediática porque le está pasando factura en su vida personal y desea continuar con todos sus proyectos en un segundo plano sin ser perseguida por los medios de comunicación ante las diversas noticias que afectan al exfutbolista.

Acoso mediático

"Dado el acoso mediático al que estoy sometida, he decidido dejar de utilizar mis redes sociales", ha anunciado en su perfil de Instagram, expresando su deseo de que "los medios de comunicación dejen de esperarme en aeropuertos, fuera de mi casa u hoteles, a la salida de restaurantes, en medio del trabajo o abordar a mis seres queridos".

"Ojalá que todo esto cese porque está afectando a mi salud mental y a mi vida social", ha añadido. "No soy una persona que viva de exponerse públicamente porque me causa ansiedad y no es para mí, gracias a Dios mi trabajo lo puedo realizar lejos de los focos mediáticos", ha aclarado.

Separación

La modelo también ha querido dar las gracias "a todas las personas que me han apoyado con mensajes preciosos de ánimo y que incluso me han abrazado por la calle sin conocerme". "No sé si volveré por aquí, es tiempo de desconexión", ha finalizado en su escrito.

Joana Sanz confirmó su ruptura con Dani Alves hace unas semanas a través de una carta escrita de su puño y letra. La supuesta violación que su expareja cometió a finales del año pasado ha hecho que la modelo quiera comenzar una nueva etapa en su vida