Nuevo frente abierto para Ana María Aldón. Unas declaraciones de su hija Gema Aldón en la revista Lecturas han empañado el buen momento personal que vive tras el divorcio de José Ortega Cano. Además de revelar que su madre ha vendido el piso en el que residía para comprar su chalet y que no tiene "donde vivir", no duda en confesar que se sintió abandonada por su progenitora, que con 17 años la dejó en Sanlúcar para irse a Madrid con el torero.
Unas declaraciones de las que Ana María se ha enterado este domingo en Fiesta, ya que no había tenido fuerzas de leerlas en toda esta semana. La colaboradora ha reconocido que "entiende" perfectamente a su hija: "Cuando me vengo a vivir a Madrid no la dejo abandonada. Se vino conmigo, pero no se habitúa, no está cómoda, prefiere estar donde se ha criado, en el pueblo y con la familia. Pero ella ya iba a hacer 18 años y no podía hacer otra cosa".
¿Abandono?
"Yo me volví embarazada, con la hija de mi marido y sin dejar de llorar. Aquí había unos problemas que requerían estar al pie del cañón, venían tiempos muy turbios y yo ya no me podía ir. Ella lo que ve es que estaba atendiendo los problemas y las necesidades de otra familia, y sé que eso no me lo va a perdonar nunca, aunque a lo mejor soy yo la que no me lo he perdonado a mí misma", ha recordado visiblemente emocionada.
Sin embargo, ha sido al escuchar que su hija cree que cuando la mira le recuerda a su padre y el pasado tan duro que tuvo, cuando Ana María se ha derrumbado por completo: "Yo me quedé con 17 años con un bebé en brazos mientras mis amigas hacían cosas típicas de su edad. Lo hice lo mejor que pude o que supe y ella ahora que es madre sabe que hice lo que hace ella, pero yo me aparté y ella siguó con la relación tóxica. Ella no quiso hacer lo mismo que yo porque no quería que su hija se criara sin padre".
Disculpas
"He ayudado a Gema todo lo que he podido y más. En estos 27 años que tiene mi hija he sufrido mucho y siempre he estado ahí a su lado, y cuando no he podido estar físicamente, he estado por teléfono siempre que me ha necesitado. No me arrepiento porque tengo dos hijos, pero me hubiese gustado haber tenido dos cuerpos para estar al lado de cada uno", ha añadido, confesando que "a lo mejor no he sido tan buena madre y no he estado a la altura".
Gema ha entrado por teléfono en el programa para hablar con ella y disculparse. "Te mando mucha fuerza, que estés tranquila, pídele al universo que todo te vaya bien. Y lo siento mucho si no he estado a la altura como madre. Te quiero mucho y doy la vida por ti. Hay personas que pierden a su madre pero tú la tienes aunque no esté 24 horas a tu lado", le ha dicho la diseñadora a Gema que, a su vez, ha reconocido que ella "tampoco ha estado a la altura como hija": "Nadie nace sabiendo".