La noche de ayer fue de lo más emocionante para Kiko Matamoros en Supervivientes. El colaborador de Sálvame se enfrentó al puente de las emociones en el que se sinceró como nunca sobre su papel de padre: "Me avergüenza. Creo que no he sabido estar a la altura de lo que mis hijos se hubieran merecido".
El superviviente ha echado la vista atrás para valorar lo rápido que ha pasado el tiempo al ver crecer a sus hijos: "La vida pasa y el tiempo no es recuperable. De repente te das cuenta de que ni tus hijos han disfrutado suficientemente de ti, ni tú de ellos. Es un gravísimo error que he cometido que creo que no tiene reparación".
Se arrepiente de muchas cosas
Así las cosas, Matamoros espera "que las cosas se puedan edulcorar" y que sus hijos "no tengan el peor recuerdo de mí que podrían haber tenido". Es por ello que se ve con fuerzas para enmendar su error y recuperar el tiempo perdido con sus hijos: "He descubierto tarde a una hija maravillosa gracias a la intervención de mi pareja. Me da pena porque sé que no lo tuve fácil pero tendría que haber hecho más y ser consciente de que la vida pasa".
Después de esas duras confesiones, Kiko ha recibido las cartas de cuatro de sus hijos, Diego, Laura, Irene y Lucía. Sin embargo, faltaba una, la de su hija Anita, a la que se ha referido durante todo su camino. Preso de la emoción, no ha podido evitar dedicarle unas emotivas palabras a la joven: "Lo único que espero es que mi hija sea feliz, que sepa que para quererla no tengo que tenerla al lado. La quiero como quiero a cualquiera de mis hijos. Cuando necesite algo voy a estar ahí, quiera ella o no quiera ella".
La relación con su hija
Matamoros se ha abierto en canal y ha reconocido que no la olvida y que, igualmente, sigue formando parte de su vida. "Y yo de la suya. No somos el primer padre y la primera hija que se desentienden y tienen problemas de comunicación. La llevo en el corazón y todos los días me acuerdo de todos. Que lo sepa", ha reconocido el colaborador.
Unas emotivas palabras que le lanza desde Honduras y sobre las que, por el momento, la aludida no se ha pronunciado el respecto. Eso sí, sus confesiones más oscuras hicieron que el programa de anoche se posicionase con su segunda mejor nota de la temporada, un 18,3% del share. Y no solo eso, sino que logró que Matamoros fuese el salvado en esta nominación.