Luz Casal es una de las voces más destacadas de la música española. Cuatro décadas después de iniciar su carrera discográfica, la artista ha publicado su primer álbum en directo, Luz Casal y la Real Filharmonía De Galicia Solo esta noche 21/7/2021, un concierto que ofreció el pasado verano en la plaza del Obradoiro de Santiago de Compostela. Un espectáculo en el que versionó temas míticos como No me importa nada y Piensa en mí.
La intérprete de Te dejé marchar recreará aquella noche el próximo 20 de junio, de nuevo con sus músicos y con la Real Filharmonía de Galicia en otro concierto único que esta vez tendrá lugar en el Teatro Real de Madrid en el marco del Universal Music Festival.
Trayectoria
La cantante ya está preparando las nuevas canciones que grabará este año para su nuevo disco original. Serán sus primeros temas inéditos desde antes del inicio de la pandemia. Es una de las artistas más exitosas de la industria musical con la venta de más de 15 millones de copias de sus discos por todo el mundo y el recibimiento de diversos premios, como un Grammy Latino Honorífico, el Premio Nacional de las Músicas Actuales y la Medalla de las Artes y las Letras de Francia.
"Mi objetivo es intentar ser mejor y ofrecer cosas que interesen a la gente. Tengo que mejorar, siempre se puede. Eso es lo que mantiene la llama encendida [...] En ese sentido, es casi infinito el camino", apunta Luz Casal en una conversación con Crónica Directo.
--Pregunta: Ha publicado el primer disco en directo de sus cuatro décadas trayectoria. ¿Por qué ahora?
--Respuesta: Tiene los dos elementos importantísimos para un disco en directo, que son que capture el alma, la magia y las distintas cosas poderosas que suceden en un concierto, y que suene que te peina el pelo. Considerando que fue solo en una noche, o sea, que no ha habido posibilidad de usar una canción determinada de otro día, saltamos sin red y caímos de pie. Al tenerlo tan claro, era tan obvio y tan palpablemente bueno según nuestro criterio, que pensamos que sería bastante chungo no compartirlo con la gente que disfruta de los conciertos. Por otro lado, también tiene el añadido de que, al tener unos arreglos y sonoridades diferentes, para cualquiera resulta como un disco original, no es la repetición por enésima vez de una canción que puedes haber escuchado hace 10 o 20 años.
--¿Quería aportar muchos cambios?
--Yo considero que, sobre todo, las del disco La pasión son las que sorprenden menos porque tienen arreglos prácticamente idénticos y siguen teniendo ese carácter. Pero el resto, verdaderamente es sorpresivo.
--¿Cómo fue el trabajo hasta lograr la sonoridad?
--He tenido la suerte de contar con un arreglista con el que había trabajado de manera breve, pero había visto los resultados de su trabajo y me habían gustado. Fuimos trabajando los arreglos, me daba opciones, ejemplos de cómo podría sonar con las diferentes secciones e instrumentos, y poco a poco hasta llegar a la conclusión de que así estaría bien. Entre tener la confianza puesta en una persona que ha hecho un trabajo maravilloso, saber que iba a sonar muy bien teniendo a uno de los mejores ingenieros de sonido de directo que hay en España, que es José Luis Crespo, y contando con que luego eso iba a ser interpretado tanto por la Real Filharmonía de Galicia como por mi banda que se tenía que amoldar al nuevo carácter y al nuevo ambiente, solamente fue cuestión de elecciones. Hacer un repertorio acorde a todo eso.
--Eran más de 60 personas en el escenario.
--Casi 70 personas, un montón. Además, con la exigencia que teníamos de distancia entre músico y músico. Estábamos en un escenario enorme, uno de los más grandes en los que yo he tocado.
--¿Había muchas restricciones?
--Sí, teníamos solamente el permiso para que pudieran asistir 1.000 personas. Por eso dimos por streaming el concierto y por eso también, cuando llegamos a escuchar las canciones para rememorar ese día y esa noche, pensamos en hacer el disco para toda la gente que nos sigue y que en muchos casos nos ha pedido un disco en directo. Nos parecía que ese concierto había estado demasiado restringido para unos pocos.
--Sus seguidores habrían agradecido un disco en directo durante el confinamiento.
--Yo creo que ha habido mucha gente que, como hicimos todos, recordó a un músico en especial o una época determinada. Afortunadamente, yo creo que la música ha sido una enorme compañera para ese periodo tan duro que hemos vivido todos.
--Pronto ofrecerá otro concierto en el Universal Music Festival, ¿repetirá su concierto con la Real Filharmonía de Galicia?
--No me gusta la palabra repetir, no vamos a repetir, como yo no repito un concierto cuando estoy de gira. Lo que hacemos es tener una serie de canciones elegidas y hacemos casi siempre las mismas. Alguna noche incorporamos o quitamos alguna, pero el grueso del repertorio es prácticamente igual. Aquí el repertorio será el mismo, los intérpretes seremos los mismos, pero no será el mismo concierto. Ha pasado un año, tendremos sensaciones y predisposiciones distintas, estamos en otro escenario, en un lugar cerrado y en un teatro. Todos esos elementos lo diferenciarán, y mi propósito y el de la banda es disfrutarlo más todavía de lo que lo hicimos. Cuando vuelva a ensayar con la orquesta, seguro que habrá testimonios de muchos de ellos que dirán que ya no tienen el nerviosismo o la preocupación del primer día. Eso sobre el papel implica que sea más disfrutado y esperamos que ese entusiasmo o esa naturalidad sea percibida por el público.
--Sacará disco el año que viene, ¿qué puede avanzar?
--Tengo bastantes canciones, algunas de ellas creo que no las voy a desarrollar más esperando a reunirme con los músicos y productores e ingenieros en el estudio. Me siento muy satisfecha de muchas de las letras escritas, hay canciones que las escucho de vez en cuando ya prácticamente al 80% de lo que luego quedará y, aunque pase un mes sin escucharlas, me produce la misma sensación. Con lo cual, me parece que eso es una señal muy buena de que las canciones merecen la pena. Tengo un punto muy bueno para grabar nuevas canciones, pero luego es una incógnita qué resultado puede tener o si va a ser de interés para alguien. Pero yo sí tengo la sensación de que tengo material bueno que me va a servir para expresar cosas distintas, como suelo hacer siempre, de manera que me produzcan satisfacción una vez realizadas como al menos hasta el día de hoy me la están produciendo.
--Será el primer disco que publique tras la pandemia, ¿se verá toda esa época oscura reflejada?
--El drama y la ansiedad, verdaderamente, no. Yo creo que algunas reflexiones tienen que ver con ese periodo en el que uno estaba ensimismado o falto de libertad y de movimientos, pero al menos desde mi juicio, lo poco que me pueda separar de las canciones y analizarlas de esa manera, no hay drama ni grandes pesares. Digamos que tiene un punto más luminoso que oscuro.
--¿Le gusta cómo han envejecido sus canciones?
--Siempre me ha parecido que las cosas que me afectan las digo de manera muy clara para mí, pero luego, analizándolas con el paso del tiempo, veo que pueden ser interpretadas por los demás, e incluso por mí misma, de otra manera. A mí eso, más que preocuparme, me produce gusto, porque así cada vez que las interprete puedo hacerlo de una manera y me da opción de que las canciones tengan una libertad mayor y no repita. Cantada una misma historia de una relación entre dos personas, esta puede ser de pareja, de amigos o de enemigos. En ese sentido, me gusta más tener abierto el camino y hacerlo de manera distinta. Eso me atrae mucho y siempre me ha atraído.
--Tras tantos años en la industria, ¿está cansada?
--Cansancio es una palabra que yo uso nada más cuando me tumbo en un sofá porque ya no puedo más. Si estuviera cansada no estaría en activo, me dedicaría a leer más y ver más exposiciones de pintura. El cansancio no existe, no es algo que yo sienta dentro de la música. Obviamente, puedo estar exhausta, y muchas veces lo estoy, pero sé que el cuerpo se resiente. Lo que tengo es ilusión, esa es una palabra que uso con cierta frecuencia. Lo que he hecho ya está, tiene el significado que tiene, pero yo estoy en el hoy, ese es mi palpitar.
--¿Cómo se mantiene esa ilusión?
--Teniendo vocación y ganas de descubrir más de lo que sabes, no solo en la música, sino en muchísimos aspectos.
--Ha recibido muchos premios y reconocimientos, ¿le falta alguno?
--Realmente, si hablamos en términos de reconocimientos, cualquiera que se añada a la larga lista será bien recibido, porque a mí me parece que un premio es como el aplauso resumido que me da un número indeterminado de personas. Pero yo como objetivo no tengo conseguir tal premio, llegar a no sé qué cifra de personas que me sigan en no sé qué plataforma, o un número determinado de personas que compren este álbum y los venideros. Mi objetivo es intentar ser mejor y ofrecer cosas que interesen a la gente. Tengo que mejorar, siempre se puede.
--¿Con su experiencia aspira a mejorar?
--Eso es lo que mantiene la llama encendida, darte cuenta de que hay mucha gente que está haciendo cosas interesantísimas y tú saber interpretarlas, entenderlas, conocer más de tu propio trabajo y descubrir aspectos en ti misma que puedan amplificar aquellos que tú haces, que enseñas y que das a la gente. En ese sentido, es casi infinito el camino.