Lo tenía difícil. Ella misma los sabía. Y los peores presagios se han cumplido. No ha podido ser, Penélope Cruz se ha quedado sin el Oscar a la mejor actriz protagonista por su papel en Madres paralelas.

La afortunada ha sido Jessica Chastain quien, con su representación de Tammy Faye en Los ojos de Tammy Faye, se ha llevado este merecido reconocimiento, por el que ha luchado en sus últimos años.

Debilidad de los académicos

Penélope no lo tenía fácil. Los papeles basados en personajes reales son una debilidad para los críticos de la academia. Lo han demostrado a lo largo de los años y esta vez no ha sido una excepción.

La intérprete tampoco se ha mostrado molesta al respecto. En todo momento hasta llegar hasta aquí, reconoció que sus compañeras hicieron un trabajo excelente y no contaba con irse con el Oscar a casa.

Reconocimiento

Tampoco es que Cruz se vaya sin nada a casa. El reconocimiento por parte de la academia de Hollywood ya supone todo un regalo para ella y para la cinta de Pedro Almodóvar, que ha tenido doble representación en esta gala, por ella y por Alberto Iglesias, nominado por la banda sonora del film, quien también se ha ido de vacío.

Asimismo, la actriz ya tiene un Oscar en su haber. No fue por ninguna película española, sino gracias a Woody Allen y el papel que le dio en Vicky, Cristina, Barcelona, por el que recogió el premio a mejor actriz secundaria.