Alba Santana Ximénez ha entrado en directo esta tarde en Sálvame para desmentir la información que publicó la revista Lecturas hace una semana sobre la herencia que le habían dejado sus padres. Al parecer, Mila le habría dejado tres millones de euros en metálico mientras que Manolo la habría desheredado.
Sin embargo, ella niega ambas informaciones: "Es mentira. Ni mi madre me ha dejado esa cantidad de dinero ni mi padre me ha dejado sin nada". La joven creía que se trataba de un medio amigo, pero que nadie se ha puesto en contacto con ella para informarse y contrastar esa información: "No es solo la noticia en sí, pero tengo la impresión de que la prensa va a seguir intentando seguirme y saber dónde vivo".
No hablará con la prensa
Al parecer, multitud de medios de comunicación y revistas de la prensa del corazón se habrían puesto en contacto con Alba para que diese más información sobre el tema. No obstante, ella ha querido hacer una clara declaración de intenciones: "No tengo ninguna intención de dar ninguna entrevista ni exclusiva para ningún medio".
La hija de la colaboradora y el tenista solamente pide que la prensa le deje pasar el duelo de la forma más tranquila posible en su casa en Ámsterdam con sus hijos y su marido. "Quiero que se me me deje en paz y conservar la intimidad que he tenido siempre", ha suplicado con la voz entrecortada.
Baja de ánimos
Alba asegura que no va a emprender medidas legales contra la revista pero sí que le gustaría que se retracten. "A partir de eso, estoy recibiendo muchas llamadas de gente que quiere declaraciones mías, pero ahora mismo estoy en un momento delicado. Os pido ayuda para poder hacer mi duelo en la máxima intimidad", le ha pedido a Jorge Javier Vázquez.
Así las cosas, Santana Ximénez ha aprovechado para explicar cómo se encuentra: "Los echo mucho de menos, el vacío es enorme, pero sé que tengo que mirar por mí misma, mis hijos y mis padres, que querrían que yo estuviese bien". Aunque asegura que está "baja de ánimos" y que no se reconce, Alba deja claro que necesita un tiempo para asimiliar lo ocurrido sin estar en el foco mediático.