Novak Djokovic (34) permanece recluido en un hotel de Melbourne para solicitantes de asilo desde el pasado 6 de enero a la espera que el gobierno australiano, y en concreto, Alex Hawke, ministro de Inmigración, decida si se ejecuta su deportación tras haberle retirado el visado. El tenista, que debía participar en el Open de Australia, ha sido acusado de incumplir con la política sanitaria de acceso al país al negarse a vacunarse contra la Covid-19.
El serbio, que en anteriores ocasiones ya se había convertido en el blanco de todas las críticas por sus polémicos alegatos antivacunas, aseguró que siguió todos los pasos migratorios necesarios para ingresar en Australia al presentar una exención médica que demostraba haber superado la enfermedad en dos ocasiones. Primero en verano del 2021, y luego a mitades de diciembre del mismo año.
Un hotel para inmigrantes
A pesar de que este mismo lunes el juez Anthony haya ordenado la puesta en libertad del tenista y haya permitido su participación en el abierto australiano, el gobierno del país ha ordenado su detención dos horas después. De este modo, Novak deberá permanecer recluido en el Park Hotel melburniano hasta que este martes se decida si es expulsado o no del territorio oceánico.
El alojamiento en cuestión se trata de un cuatro estrellas de 120 habitaciones que el Ejecutivo estatal utiliza para las personas en situación de irregularidad. Aunque el establecimiento cuenta con una piscina en la azotea y una valoración de cuatro sobre cinco en el portal TripAdvisor, The Park ha sido tildado de "infame" después de que hayan salido a la luz varias imágenes que muestran las condiciones en las que se encuentran los inmigrantes que se encuentan alojados en él.
Djokovic considerado como un criminal, según el gobierno serbio
De hecho, Hossein Latifi, uno de los jóvenes que está a la espera de recibir asilo, ha difundido varias instantáneas de los menús que reciben. Cabe destacar que Amnistía Internacional denunció este mismo viernes que en el interior del hotel hay detenidos desde hace entre uno y nueve años.
Por su parte, el primer secretario del ministerio de exteriores serbio ha denunciado que el tenista es tratado como "un inmigrante ilegal, un criminal" por parte de las autoridades australianas. "Todo por no estar vacunado contra la Covid-19", afirma.