Tres meses después de poner rumbo a Honduras, los supervivientes afrontan ya la recta final del concurso. El paso del tiempo y la distancia de los suyos, causa mella entre los concursantes. Prueba de ello, Olga Moreno ha sido la protagonista del bajón más dramático de la semana.
La mujer de Antonio David Flores terminaba hecha una mar de lágrimas al acordarse de su familia. Sin embargo, la sevillana vive hoy uno de los días más felices del reality. Tras proclamarse como la ganadora de la recompensa gracias a la audiencia, la empresaria ha disfrutado de la vita de su hermana.
Del llanto a la risa
Rosa ha irrumpido en medio de la prueba de su hermana. "No me lo creo, es que no me lo creo" gritaba Olga Moreno mientras abrazaba a su hermana pequeña. "Estoy en shock, es que no me lo podía esperar, estaba deseando de venir, es mi hermana chica, la malcriada", ha asegurado la mujer del ex guardia civil a Lara Álvarez.
Sin embargo, al parecer, la llegada de ‘Rosita’ no ha hecho mucha gracia al resto de sus compañeros. Y es que la llegada de la andaluza ha desbaratado todos sus cálculos. Por ello, la organización del programa ha dado un paso al frente: “La visita de la hermana de Olga se trata de algo puntual”, ha asegurado Álvarez.
La llegada de Rosa pone las cuentas de los ‘supervivientes, patas arriba
Por su parte, Rosa lo único que ha confesado es que toda la familia está muy orgullosa de ella. En este sentido, ha reconocido que sabía que su hermana era fuerte, pero no tanto de mente: "Sabíamos que era fuerte pero ha superado las expectativas, tiene una fuerza mental increíble, es que la fuerza que tiene, el aguante de verdad", ha destacado.
Sin embargo, lo que no parece haberle quedado muy claro a la superviviente es que puede contarle su hermana y que no. "¿Por mi gente si le puedo preguntar?", ha preguntado la madrastra de Ro Flores a Carlos Sobera.