La joven mexicana Andrea Meza es desde este domingo la nueva Miss Universo. Con tan solo 26 años, y 1,80 metros de altura, Meza se ha alzado con la corona del certamen de belleza entre las 73 candidatas.
En una gala celebrada a las afueras de la ciudad de Miami (EEUU), la noche ha dejado como segunda y tercera clasificada a Miss Brasil, Julia Gama, y Miss Perú, Janick Maceta.
Ingeniera, feminista y vegana
Además de su exuberante belleza, estas tres mujeres son activistas profesionales. En concreto, Meza, además de ser feminista, vegana y animalista es embajadora del turismo de Chihuahua e ingeniera de software de profesión.
En la ronda de preguntas por parte del jurado, Meza se ha mostrado especialmente crítica con la gestión del gobierno azteca a lo largo de la pandemia: “Yo habría cerrado el país mucho antes de lo que se hizo, y ahora estaría cuidando mejor a los ciudadanos, porque hemos perdido mucha gente y no podemos perder a más”, afirmó la mexicana.
Acoso escolar
Tras ser proclamada ganadora del concurso, Andrea ha dejado al descubierto sus momentos más complicados. “Entre los 12 y los 16 años no me sentía para nada atractiva. Tenía dificultades para convivir con mis compañeros en la escuela. Le tenía demasiado miedo al qué dirán. Tenía muchas inseguridades”, ha confesado.
Por otro lado, la representante española, Andrea Martínez quedó fuera de la gran fase final. La joven leonesa de 27 ha quedado por detrás de las 21 finalistas. Martínez es licendiada en Administración y Dirección de Empresas, y cursó un máster de Executive Project Management en Milán y Dubai. Cabe destacar que la castellana también fue seleccionada para jugar el Europeo Sub'15 con la selección española de baloncesto.