Rocío Carrasco ha seguido explicando los episodios de malos tratos que supuestamente vivió con Antonio David Flores. La hija de Rocío Jurado ha explicado en el tercer episodio de su documental un momento muy duro que vivió.
Después de que ella descubriera la infidelidad con una camarera en un bar durante el verano, él la trataba de loca y le decía que “por culpa de los celos iba a malparir”. “Yo no me creí nunca que estaba loca, pero me hizo dudar sobre mi actitud y mi verdad”, ha confesado Rociíto.
Ventana
Pero los episodios con esa chica, Sonsoles, continuaron durante todo el verano. La dejaba sola por las noches, mientras ella estaba embarazada de cuatro meses de su hijo. Sin embargo, ella comenzó a sentir muchas contracciones y pinchazos en la barriga.
“Un día cuando volvió de fiesta le dije que era un sinvergüenza. Él me cogió en volandas del camisón y me sacó medio cuerpo por fuera de la ventana. La barriga me estaba dando en el borde. En ese momento giré la cabeza como pude y le dije: ‘Procura que cuando llegue abajo me haya matado’. En ese momento él tomó conciencia de lo que estaba haciendo y me soltó”, ha explicado.
Rejas
Años después se ha conocido ese episodio, del que él contó que no fue real porque había unas rejas en la ventana. Sin embargo, Rocío ha enseñado un certificado del cerrajero de Chipiona donde se acredita que las rejas no se pusieron hasta el año 2010.
“Este hecho sucede en la planta de arriba, en el dormitorio de mi madre. A no ser que yo hubiese gritado, allí no se entera nadie de nada”, ha comentado Rociíto. Y decidió explicarle el episodio a su prima para que, en caso de que le pasara algo, hubiera alguien que lo supiera.