La cómica y presentadora está atravesando el peor año de su vida. En cuestión de meses, Paz Padilla ha perdido a su madre y al que ha sido el amor de su vida. Sin embargo, la presentadora de Telecinco se muestra esperanzada de seguir adelante y qué mejor forma que alegrándose la vista. No cabe duda que José Antonio Canales Rivera, más conocido por sus apellidos, comparte un evidente parecido físico con sus primos Fran y Cayetano Rivera, aunque no con Kiko Rivera.
Y es que la presentadora se derrite cada vez que ve a este cuarentón andaluz. "Eres un hombre hecho y derecho" le ha confesado recientemente.
Canales desmiente a Cynthia
El también torero de profesión regresaba hace unas semanas a Sálvame a raíz del conflicto que mantienen sus primos contra Isabel Pantoja. Una oportunidad de oro que le ha servido para volver a la pequeña pantalla por la puerta grande. Protagonista indiscutible de la semana, el colaborador ha sido acusado de cometer una infidelidad a su novia.
Cynthia Martínez se sentaba durante la noche del sábado en el Deluxe para confirmar una supuesta noche de pasión con el matador. De hecho, la que en su día fuera Miss Barcelona traía diferentes audios y conversaciones de Whatsapp para probar todo lo que contaba.
Sin embargo, Canales Rivera sigue negando la mayor y asegura que no llegó a mantener relaciones sexuales con ella. El "maestro" acudía el lunes a su nuevo lugar de trabajo para responder a sus compañeros después de la entrevista de la joven.
La cicatriz de Canales Rivera
Previamente, la presentadora del programa de las tardes de Telecinco era la encargada de mantener una pequeña charla con el colaborador. Y es que a Paz, hubo algo que le llamó mucho la atención de la entrevista del Deluxe de la joven. Cynthia no recordaba haber visto una enorme cicatriz que cruza todo el abdomen del torero y que va desde el ombligo hasta su entrepierna.
Canales que aprovechó para demostrar qué grande es su cicatriz, dejó a Paz atónita. Y es que a punto estuvo el diestro de dejar al descubierto sus partes nobles. "¡Ooh, qué dos pares de cornadas!" soltaba la gaditana, mientras añadía: "Eso se ve a no ser que fueras con el estoque".