El pasado mes de septiembre, Mónica Carillo anunciaba que su ausencia de los informativos de fin de semana de Antena 3 se debía a que se estaba tratando un cáncer de piel. Fue en junio cuando la presentadora decidió ir al dermatólogo porque una herida no le había acabado de cicatrizar.
El cirujano le confirmó que se trataba de un carcinoma basocelular, un tipo de cáncer de piel localizado en la nariz. Todo esto lo explicaba la periodista en una imagen que mostraba las secuelas de su rostro a través de su perfil de Instagram.
Consecuencias personales
Aunque no suele hablar de su vida privada, tres meses después de aquella publicación en sus redes sociales, Carillo se ha sincerado sobre la enfermedad en una entrevista con su amiga y compañera, Ana Pastor, para Newtral.
“Aunque no hay peligro de muerte, te puede afectar. Yo tuve consecuencias en lo personal y lo profesional”, explicó la conductora de los informativos. Y es que, al ser un carcinoma en la nariz, tenía tres zonas afectadas y el cirujano tuvo que coserle “un montón de puntos” que quedaron en una cicatriz de “colgajo de nota musical”.
En proceso de aceptación
“Te das cuenta que es un proceso y aún a día de hoy aún me cuesta asumirlo y me acompleja un poco”, comentó la comunicadora. “A nivel personal, te toca ir aceptándote”, confesó Carillo, que aún se encuentra en ese proceso de superación, pero “con calma, sabiendo que las cosas han pasado”.
“Lo que noto es que ha sido como envejecer de golpe, como si cuando te quedas embarazada de un día para otro te sale la barriga de los nueve meses. Un cambio muy rápido”, reveló la escritora. “Y claro, luego cuando das a luz te suelen quedar algunas secuelas, como estrías”, hizo referencia a la cicatriz que le ha quedado en la cara.