Desde que se decretara el estado de alarma en España por el coronavirus, las cosas se han puesto bastante feas para Raquel Mosquera. Y es que la peluquera se ha visto obligada a cerrar los dos negocios que tenía y que le reportaban muchos beneficios económicos.
Dos duras decisiones, en tiempos de crisis, a las que se tiene que sumar la inestable situación laboral de su marido, Isi, quien también se ha quedado sin trabajo debido a la pandemia del Covid-19. ¿Qué te parece?
Raquel Mosquera se queda sin nada
La que fuera mujer de Pedro Carrasco está atravesando un duro calvario. Y es que de la noche a la mañana se ha visto obligada a cerrar tanto su salón de belleza de Las Rozas, donde ha hecho un ERTE con las personas que tenía contratadas, como su tienda de ropa física y online, porque considera que con los tiempos que corren la gente ahora no está para trapitos. Dos importantes decisiones, según recoge Semana, que han tenido un brutal impacto en la economía de Raquel Mosquera.
Por este motivo, y aprovechando que ahora no tiene trabajo, está acudiendo a menudo a Sálvame como colaboradora, para comentar los temas más destacados tanto de la prensa rosa, como de Supervivientes. De esta manera, y pese al cierre de sus dos negocios, que plantea abrir cuando termine la pandemia, puede seguir ingresando dinero sin la preocupación de no saber si llegará o no a fin de mes.
Raquel Mosquera se refugia en su marido
Tanto la peluquera como su pareja, el nigeriano Isi, llevan confinados en su casa desde el pasado 13 de marzo, cuando Pedro Sánchez decretó el estado de alarma. Un encierro que está sirviendo a Raquel Mosquera para pasar mucho más tiempo con sus hijos, puesto que antes, debido al trabajo, pasaba seis de los siete días de la semana fuera de casa. Además, también está aprovechando para recuperar todo el tiempo perdido al lado de Isi. "Guisamos juntos y es una manera genial de compartir momentos en pareja", confiesa para la revista Semana.
Sin embargo, no todo es alegría en la vida de Mosquera. Y es que la peluquera tenía pensado viajar a Nigeria, junto con sus hijos, para que conocieran a la familia de Isi. Un plan que, por el momento, han tenido que posponer debido a la pandemia del coronavirus. Como también han aplazado el último adiós al padre de Isi, quien falleció en Nigeria a los 98 años de edad.