Tan solo una noche le ha bastado a la periodista sevillana para tocar fondo, y derrumbarse como nunca antes había hecho en la televisión. Y es que Mila Ximénez está de lo más incómoda dentro de la casa de Guadalix de la Sierra.
Una incomodidad que se refleja a través de su estado de ánimo, puesto que la televisiva está muy desanimada y no deja de llorar. Tanto es así que el presentador del programa, Jorge Javier Vázquez, ha querido subirle los ánimos en directo. ¿Qué le ha dicho?
Mila Ximénez rompe a llorar
Después de protagonizar la primera gran bronca del concurso, tras negarse a entrar en la casa por la gatera, Mila Ximénez también ha protagonizado el primer gran berrinche del concurso, con el que ha llegado a pedir perdón al súper y a amenazar con abandonar. Un bajón de campeonato que le ha llegado a la periodista después de que los organizadores del concurso hayan decidido que, por el momento, los inquilinos tendrán que vivir en un búnker.
"Espero poder hacerlo. Es que no tengo mucho que ver con casi nadie", ha dicho Ximénez encerrada en el confesionario entre lágrimas. Y ha seguido: "Creo que me he equivocado y no me lo he pensado muy bien". Tanto es así que la de Sálvame ha confesado que "ha habido un momento en el que me quería escapar". ¿Se convertirá en la primera concursante en abandonar la edición de GH VIP?
Jorge Javier, preocupado por Mila Ximénez
La televisiva, quien se ha puesto a llorar nada más ver a su amigo y compañero al otro lado de la televisión, ha confesado: "Quiero estar bien y quiero adaptarme, pero hay momentos en los que, inevitablemente, me pregunto qué hago aquí". Unas declaraciones a las que el de Badalona ha respondido diciendo que se correspondían con el proceso de adaptación.
Aunque, para Mila, no todo es normal. Y es que la colaboradora no quiere desvelar que lleva un balón gástrico en el estómago, para no ser un lastre para sus compañeros. Un percance de salud, que se suma a la diferencia de edad que la televisiva tiene con sus compañeros de aventuras. "Tengo la sensación de que mi edad no tiene nada que ver con la suya, pero no quiero que me traten como una persona a la que tienen que cuidar ni nada". ¿Son verdaderas estas palabras de Mila? ¿O se trata de una estrategia por parte de la periodista para hacer pena a la audiencia?