En los últimos cinco años han surgido nuevos negocios enfocados en la salud femenina pero con un claro componente tecnológico, ocupando un nicho de mercado que parecía olvidado y que parece que va a aportar no solo interesantes soluciones para las mujeres, sino que además generará importantes cantidades de dinero.
Se lo conoce como Femtech, o lo que es lo mismo, una mezcla de femenino y tecnológico, y algunos analistas como los de Frost & Sullivan apuntan que en el año 2025 moverá la nada desdeñable cifra de 50.000 millones de dólares, lo que deja claro el interés que despierta la creciente oferta.
Origen del Femtech
El origen de esta tendencia que busca mejorar el bienestar y la salud de las mujeres se halla hace menos de cinco años, cuando una emprendedora danesa llamada Ida Tim puso en marcha una aplicación denominada Clue que vigilaba la salud menstrual. La idea fue todo un éxito, ya que actualmente está presente en unos 180 países y se la han descargado más de ocho millones de personas.
Y fue precisamente la propia emprendedora la que comenzó a hablar de Femtech, es decir, del uso de las innovaciones tecnológicas en el cuidado femenino, toda vez que en el mercado apenas había empresas dedicadas a utilizar las nuevas tecnologías en estos menesteres.
No es 'cuidado femenino'
De este modo, Ida Tim también se desmarcaba del habitual cuidado femenino, que sí está cubierto con otros muchos productos, y se centraba en los dispositivos y aplicaciones que incluían el componente más techie.
Estas van desde lo más básico como las apps para el control de los días de mayor fertilidad o del propio periodo, hasta gadgets diseñados para mejorar la salud o el periodo de embarazo… sin olvidar los juguetes sexuales diseñados exclusivamente para atender al placer de sus usuarias.
Ejemplos de empresas
Entre las startups que han surgido al albur de esta tendencia, hay algunas que destacan especialmente. Una de ellas es la mencionada Clue, aunque la que quizás tenga una mayor popularidad sea Elvie, gracias a sus dos principales productos.
El primero de ellos es un entrenador de suelo pélvico capaz de conectarse con el smartphone mediante Bluetooth que sacó al mercado allá por 2014, y el segundo un extractor de leche materna en el que no es necesario utilizar las manos y que además es portátil e inalámbrico.
Más aplicaciones
Otro ejemplo es la empresa española Woom, que puso en marcha una aplicación que tenía como misión mejorar las posibilidades de embarazo para aquellas parejas a las que les está costando concebir. Para ello ofrece recomendaciones e incluso calcula las posibilidades diarias. Ya ha superado con creces el millón de usuarios registrados.
En España también se gestó LactApp, que facilita información acerca de la maternidad y, como su nombre indica, la lactancia. No en vano, se ha convertido en una de las aplicaciones más descargadas entre las mujeres que se encuentran en este periodo, ya que ofrece datos contrastados que ayudan a paliar cualquier desconocimiento.
Continuo crecimiento
Como se ha apuntado al inicio, se trata de uno de los verticales en los que se espera un mayor crecimiento, uniéndose así a otros relacionados con la tecnología que ya han probado las mieles del éxito recientemente, como Fintech o Insurtech (financias y seguros).
Y no es de extrañar puesto que es un nicho donde apenas había presencia de empresas innovadoras que dedicaran su esfuerzo y sus investigaciones exclusivamente al público femenino. De hecho, en la mayoría de ellas hay mujeres al frente a pesar de que el sector tecnológico haya estado dominado generalmente por hombres.
Hay negocio
Este auge ha provocado que se haya multiplicado el negocio y que se esperen grandes movimientos económicos, tal y como se ha expuesto anteriormente. El éxito de los primeros proyectos ha invitado a otras emprendedoras y emprendedores a arriesgar y poner en el mercado sus ideas.
Tanto es así que hace tiempo que se superaron las 200 empresas en el mundo que se podían considerar Femtech. Es más, en el año 2019 ya se movieron unos 800 millones de dólares en financiaciones a proyectos que están creciendo con una rapidez inusitada.
Momento clave
Si a eso se el une la situación actual en la que todo lo virtual ha adquirido un mayor protagonismo, el resultado es que el Femtech no solo aportará pingües beneficios a quienes apuesten por la unión de los productos femeninos con la tecnología, sino que además aumentará la oferta de productos y apps destinados a mejorar el bienestar de las mujeres.
Y esto, obviamente, es una excelente noticia para todos, ya que se unen dos elementos críticos hoy en día: economía y salud.