Renovarse o morir. Esto es de lo que debe haber pensado el diseñador Jeremy Scott para idear el nuevo desfile de la firma Moschino Couture. Y es que el evento ha sido algo de lo más excéntrico, aunque esto no es nada raro proveniente Milán (Italia). Se trata de un desfile de marionetas. Sí, un desfile de títeres y no lo decimos por esos cuerpos a los que nos tienen acostumbrados los y las tops que se visten para la marca, si no, porque literalmente, la nueva colección para el 2021 ha sido presentada vistiendo a maniquíes de tamaño muy reducido conducidos mediante cuerdas.
El lanzamiento de tan peculiar campaña ha venido enmarcado en el contexto de la Semana de la Moda de Milán que se está celebrando en la capital de la Lombardía. Un evento que ha visto radicalmente alterado su formato como consecuencia de la emergencia sanitaria que está viviendo el país con la pandemia del coronavirus. Especialmente dicha ciudad italiana, principal foco de la pandemia en Europa el pasado mes de febrero.
Nueva colección
La marca del osito de peluche ha lanzado su nueva colección para la temporada primavera-verano 2021, emulando una película de marionetas. Toda una novedad en la que incluso el público asistente está hecho de la misma manera que Pinocho. No cabe duda que es una forma de lo más segura y barata con la que la marca demuestra haberse adaptado plenamente a la nueva normalidad. De hecho, ha sido el mismo director creativo y la propia firma, quienes han anunciado el evento a través de Instagram.
Algo increíble. La marca que a esta hora había hecho gala del "si no puedes ser elegante, sé extravagante" parece haber reorientado su diseño a una línea más clásica, inspirada en el Teatro de la Moda de 1945 en París. De hecho, Jeremy Scott se ha desmarcado tímidamente de esas formas tan recargadas, llenas de colores dorados y negros para sacar una nueva colección algo más discreta y con menos ornamentos.
Abandono de la extravagancia
Pero nada más allá. Solo él podía hacer que a partir de la próxima primavera, toda persona aficionada a la moda pueda ponerse la ropa del revés y que no la miren raro. O al menos eso es lo que vienen a decir sus nuevos diseños en los que abundan un montón de piezas con cortes asimétricos y que parece que estén puestas con las cremalleras del revés.
Aunque por primera vez la casa italiana parece olvidarse de esos estampados tan complicados, colores extremadamente llamativos y prendas de cuero o charol, el diseñador no renuncia a ellos y los introduce más sutilmente en tonos mucho más relajados en color pastel y con algunos detalles relucientes. Está claro que continuamos hablando de la esencia de Moschino...