Las plantas, y también las flores, son una parte fundamental de la decoración de la casa: dan color, frescor y animan a los que están cerca. Pero es importante dedicarles un rato de tu tiempo para que luzcan estupendas.
Ahora que pasamos casi todo el tiempo en casa, es un buen momento para cuidarlas y que se mantengan como si los días no pasaran para ellas. Para ello, Interflora propone una serie de consejos con los que conseguirás que tus plantas estén como el primer día (o mejor).
¿Dónde poner las flores?
La ubicación de las plantas es vital para su bienestar así que no olvides nunca: ponerlas en un lugar bien iluminado pero evitando que el sol les dé directamente. Hay que procurar alejarlas de fuentes de aire frío y de calor (la temperatura ideal está entre los 15ºC y los 25ºC). Los radiadores y los aparatos de aire acondicionado son su peor enemigo.
Si sus hojas presentan manchas en formas de círculos amarillos, entonces es el momento de cambiarla a un lugar más sombrío (pueden haberse quemado por el sol). Las hojas también pueden presentar una apariencia uniforme de color amarillo y se caen con facilidad, es posible que nos hayamos excedido con el agua. Lo mejor es ponerlas en algún rincón más luminoso y esperar a que la tierra se seque por completo antes de volver a regarlas.
¿Cuándo regarlas?
En principio depende de la época del año, pero en general las plantas de interior necesitan menos agua que las plantas de exterior, porque están más protegidas. Si al tocar la tierra está seca, riégala. Si está húmeda, no lo hagas. En verano es posible que necesite agua a diario. En invierno, bastará con una vez a la semana. Es mejor regar solo una vez pero con una abundante cantidad de agua, que más veces con menos agua. Si la planta expulsa el agua y se queda en el plato, retírala. Una buena idea es llenarlos piedrecitas o grava para que el agua no esté en contacto con la maceta.
La mejor forma de regar la gran mayoría de las plantas, es por inmersión; Consiste en ponerlas en un cubo con abundante agua durante 2 o 3 minutos, para que el centro de las raíces se humedezca bien. Pasado ese tiempo se retira del recipiente y la dejamos que expulse todo el agua. De esta forma, nos aseguramos que toda la tierra esté húmeda y así la planta se mantiene viva mucho más tiempo.También es recomendable añadir un poco de abono liquido especifico al agua con la que regamos, así nuestras plantas tendrán los niveles óptimos para seguir luciendo bien durante mucho más tiempo.
¿Cómo limpiarlas?
Para que se mantengan bien necesitan cuidados como retira las hojas secas que caen en la tierra. Además, si las hojas acumulan polvo, repásalas con un paño húmedo (así podrán respirar sin dificultad).
Si las plantas son de hoja pequeña, pulverízalas delicadamente y sacúdelas con cuidado (evita hacerlo sobre las flores). Para que brillen las hojas, prueba a pulverizarlas con un poco de agua y vinagre.