Una nueva tendencia que se ha viralizado en EE. UU. y que se ha extendido hasta nuestros días: ¡poner patitos de goma en los coches! Lo mejor de todo es el mensaje que fomenta: crear conexiones, difundir alegría y darle un sentido de comunidad entre los propietarios de los vehículos. Te explicamos cómo, dónde y por qué surgió, pero sentimos decirte que esta moda aún no ha llegado a España. ¡Cuac cuac!
El origen de los patitos de goma
Durante la pandemia en Estados Unidos nació la moda de dejar un patito de goma encima del capó o de la puerta de los coches. Esto se originó porque Allison Parliament, una gran seguidora de la marca Jeep, vio un todoterreno Jeep Wrangler aparcado en la calle y decidió dejar a su propietario un pequeño recuerdo.
Instantes antes había tenido una discusión con otro conductor, así que decidió cambiar la suerte de su día con un gesto bonito.
La mujer dejó el patito de goma encima del vehículo con un mensaje: "Cool Jeep" y colgó en Instagram su gesto con la etiqueta #DuckDuckJeep; sin imaginarse que comenzaría una moda en parte del mundo y que se prolongaría hasta nuestros días.
El reto viral en redes
Tras la publicación en Instagram, que hizo Allison, decidió hacer una comunidad en Facebook (todavía existente) donde ahí también todos los aficionados de Jeep comenzaron a publicar los patos recibidos y los regalados. Hoy son más de 91.000 integrantes. Si bien al inicio era una práctica que se limitaba al modelo Wrangler, hoy día abarca todos los modelos.
Esta costumbre se realiza ya sea durante viajes y rutas o, simplemente, en trayectos cotidianos del día a día.
¿Dónde comprar un patito de goma?
Duckstore.es es una tienda donde podrás comprar los patitos de goma más originales que puedas imaginar: de novios, de profesiones o de deportes.
Todos ellos están fabricados con materiales de alta calidad y certificados CE. Algunos están hechos de látex, con todos los detalles pintados a mano y que son más blanditos y ecológicos.
Además, de tener tienda online, hay varios establecimientos físicos en Barcelona, Madrid, San Sebastián, Segovia y Valencia. ¡Yo ya quiero mi patito de goma!