La declaración de la Renta es uno de los días importantes en el calendario de cualquier trabajador en España. La cita con Hacienda supone un mal de cabeza para muchos y se presenta como un todo o nada: o te sale a pagar o te sale a devolver.
La presencia de conceptos complejos, cifras que se escapan de la lógica y un sinfín de hojas nos pueden llevar, a muchos, a la confusión a la hora de presentar nuestro borrador. Lo cierto es que existen muchas deducciones que desconocemos por completo y que no podemos aprovechar para pagar menos o reducir la cantidad a pagar.
A continuación, te traemos algunos ejemplos que te pueden ayudar a ahorrar hasta un máximo de 6.000 euros. Te lo explicamos:
- Desgravar la hipoteca: si entraste en una hipoteca antes de 2013, tienes derecho a desgravarte el préstamo hasta un 15% de los que hayas pagado sobre una máxima de 9.040 euros anuales.
- Aportaciones a planes de pensiones: podemos deducirnos hasta 1.500 euros (30% de los rendimientos netos del trabajo en caso de menores).
- Compra de un vehículo eléctrico: es posible deducirse el 15% del valor sobre una base máxima de 20.000 euros, pero lo cierto es que el coste suele estar por encima, por lo que la cantidad máxima será de 3.000 euros.
¿Cuándo se hace la declaración de la renta del 2023?
El próximo 3 de abril de 2024 comienza la campaña de declaración del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) de 2023. La Agencia Estatal de Administración Tributaria dispone de distintos servicios para asistir a los contribuyentes en el cumplimiento de esta obligación: puedes acceder a tu borrador y tomar las decisiones adecuadas.
¿Cuánto hay que ganar para declarar a Hacienda?
- Asalariados con un solo pagador: deberán declarar si sus ingresos son superiores a 22.000 euros anuales.
- Asalariados con dos o más pagadores: deberán declarar si sus ingresos son superiores a 14.000 euros anuales.
¿Qué pasa si no se hace la declaración de la renta?
¿Qué pasa si no estoy obligado a declarar y me sale a pagar?
No estás obligado a declarar tus rendimientos de trabajo en caso de que te salga a pagar siempre que no supere el límite estipulado. Por el mismo motivo, tienes el derecho a presentarla si te sale a devolver y está por debajo: lo más probable es que sea el resultado de una mala retención.