Revuelo en Francia por el caso de Sylvain Hélaine, un profesor al que han prohibido dar clase a niños menores de seis años por considerarlo “aterrador”. El motivo de esta polémica son los 1.500 tatuajes que cubren el cuerpo del docente --incluyendo la lengua y los ojos-- y que lo sitúan como “el profesor más tatuado del mundo”.
A pesar de que Hélaine cuenta con más de una década de experiencia en el ámbito educativo se está encontrando con problemas para ejercer su profesión debido a su aspecto físico. Apodado como “el maestro más aterrador del mundo”, el docente defiende que el hecho de llevar tatuajes no debe causar miedo.
Un escollo para su profesión
Los mismos tatuajes que le han abierto las puertas de agencias de modelos, películas y series, se han convertido en un escollo a la hora de trabajar como profesor, su verdadera vocación.
Él mismo explicó que los problemas se agudizaron después de que un alumno de tres años le dijera a sus padres que había tenido una pesadilla con él. “Se quejó a sus padres y ellos escribieron una carta a la jefatura diciendo que yo era un hombre radicalizado», explicó Hélaine a la cadena francesa 'BFM TV'.
Más tolerancia
A raíz de ese episodio el centro educativo le prohibió dar clase a los alumnos más pequeños de la escuela, pese a defender que los niños tienen que aprender a tolerar a los demás, denuncia el docente.
Defiende que su aspecto ayuda a los niños a que aprendan a tolerar y respetar a los demás, independientemente de su aspecto. “Siendo como soy creo que les ayudo a ser menos racistas, menos homófobos, a no mirar a los discapacitados como animales de feria".