¿Qué haces cuando respondes a una llamada de número desconocido y acabas escuchando el mensaje pregrabado de un teleoperador? La opción más sencilla y común es colgar y seguir con tu vida como si no hubiera nada.
Pero un californiano ha decidido hacer algo diferente: crear un chatbot o bot conversacional que tiene como misión hacer perder el tiempo a los teleoperadores.
El protagonista de nuestra historia, Roger Anderson, es el dueño de un servicio de suscripción llamado Jolly Roger. Sus miles de clientes, según informa The Wall Street Journal, le pagan unos 25 dólares al año para distraer de forma masiva tanto a teleoperadores como malhechores que urden estafas telefónicas.
En concreto, Anderson utiliza chatbots que han aprendido una combinación de expresiones o respuestas para que el teleoperador tenga la sensación de que está hablando con una persona real. En realidad, no está hablando con nadie.
En el reportaje de The Wall Street Journal, Anderson explica un caso interesante. En una ocasión, uno de sus bots conversacionales, apodado Barbablanca, acabó respondiendo la llamada de una persona que se hacía pasar por un teleoperador de Bank of America. En realidad se trataba de un malhechor que quería conseguir información bancaria y privada de sus víctimas. Lo único que consiguió fue perder el tiempo, ya que Barbablanca estuvo mareando la perdiz durante prácticamente una hora.
Por ejemplo, el timador preguntó a la IA si tenía tarjetas de crédito. Barbablanca respondió que tenóia un montón y empezó a describirlas a un nivel exhaustivo: "Tengo una con la imagen de un gatito, y otro que tiene de fondo una playa. ¿Te gustan los gatitos o las playas?", preguntó la IA al timador para confundirle y hacerle perder el tiempo.
Al cabo de 36 minutos de conversación insulsa, el timador acabó colgando. Solo había conseguido un tremendo dolor de cabeza al escuchar descripciones aleatorias de tarjetas de crédito inexistentes.
¿Te gustaría contratar una IA que se encargara por ti de teleoperadores, timadores telefónicos y demás?