Caos en el aeropuerto de Ámsterdam por los filtros de seguridad

El caos se ha apoderado del aeropuerto de Ámsterdam Schipol. La tercera mayor infraestructura aeroportuaria de Europa registra estos días escenas caóticas con colas infinitas de pasajeros que intentan acceder a los filtros de seguridad de las terminales. 

Las aglomeraciones para pasar los controles llegan incluso kilómetros a fuera de los edificios, poniendo en jaque la logística aeroportuaria de la capital holandesa. La escasez de personal y la reanudación de la operativa por parte de las aerolíneas a niveles prepandemia dejan imágenes dantescas que provocan ya numerosos retrasos, cancelaciones y viajeros con billetes que se quedan sin poder embarcar en los aviones.

Piden ir cuatro horas antes al aeropuerto

La saturación que sufre en estos momentos el aeropuerto es tal que ha obligado a las autoridades a realizar una serie de recomendaciones a los viajeros que se dispongan a coger un vuelo desde Schipol. La gestora aeroportuaria aconseja acudir a las instalaciones con un mínimo de cuatro horas de antelación.

Ello a pesar de que las compañías aéreas no permiten realizar el check-in del equipaje hasta dos horas antes de la salida del vuelo. Al mismo tiempo, se pide a todos los usuarios que se desplacen a la infraestructura, que lo hagan siempre, en la medida de lo posible, en transporte público a fin de no bloquear todavía más los accesos a las terminales.

Sin visos de que la situación mejore

En los últimos días, se han instalado unas carpas que recorren parte del perímetro exterior de los edificios para proteger de los fenómenos atmósfericos a los pasajeros. Una medida insuficiente, pues las colas siguen más allá de las lonas. Y lo que es peor, la situación no tiene visos de arreglo, ya que lo peor está por llegar.

El pasado 17 de junio, el gobierno de Holanda anunciaba la limitación de pasajeros en el aeropuerto de Schipol debido a la alta demanda de pasajeros y la escasez de personal en aerolíneas y operadores en tierra para los meses de verano. El periodo más afectado será entre el 7 y 31 de julio, cuando el aeropuerto calcula que tendrá que rechazar una media de 13.500 pasajeros diarios.