Falsa alarma. El Ministerio de Sanidad desmiente que el caso de una paciente de 17 años ingresada en un hospital privado de Madrid con un problema gastrointestinal sea cólera. El departamento de Carolina Darias precisa que "el agente patógeno de este caso es vibrio cholerae no toxigénico y, por tanto, no se considera un caso de cólera, sino de una gastroenteritis por 'vibrio'".
La noticia saltó después de que el gobierno de Castilla-La Mancha precintara una finca ubicada en la provincia de Toledo después de que la menor declarara haber bebido agua del inmueble. Los primeros estudios realizados señalaban que la citada bacteria estaba presente, por lo que iban a investigar cuál era su origen.
Reportes
Desde la Junta se informó que fue el Instituto Carlos III de Madrid quien les reportó el caso, al encontrar la vibrio cholerae. Aun así, Sanidad apunta que los estudios microbiológicos descartaron el diagnóstico de cólera ante la ausencia en la bacteria de la toxina causante de esa enfermedad.
Pese a todo, la directora general de Salud Pública de la Consejería de Sanidad de Madrid, Elena Andradas, había comentado esta mañana en su intervención en la VIII Jornada sobre vigilancia de la salud pública, que se había "producido un caso de cólera diagnosticado en la Comunidad de Madrid, que se comunica no solo al Ministerio de Sanidad sino a la administración territorial correspondiente con la intervención de los inspectores de salud pública para evitar, cancelar la actividad en esa finca concreta donde había una actividad detectada a partir de la investigación epidemiológica".
Protocolos
Desde la Junta, también se han realizado las oportunas acciones de salud pública y de coordinación entre las administraciones implicadas, añaden. En este sentido, se procedió al análisis y control de la zona y de las aguas del inmueble y aledaños de Castilla-La Mancha, donde previamente había estado la paciente.
A la espera de encontrar el origen y comprobar que "no existen más riesgos para la población", el gobierno autónómico ha tratado de llamar a la calma. Aseguran que el caso de la joven “no se trata de un caso grave", de hecho ha sido dada de alta, sólo se ha procedido a activar los protocolos necesarios ante estos casos.