El expresidente catalán Jordi Pujol ha sido ingresado en un hospital por una arritmia cardíaca. El ex jefe de Govern, que tiene 91 años, se recupera del problema en el corazón desde el jueves, aunque su estado no reviste gravedad.
Pero, ¿qué es una arritmia? Se trata de un trastorno de la frecuencia o del ritmo cardíaco. Ocurre cuando los impulsos eléctricos que coordinan los latidos cardíacos no funcionan adecuadamente, lo que hace que el corazón lata muy rápido (taquicardia), demasiado lento (bradicardia) o de una manera irregular.
Causas y síntomas
Una arritmia puede no causar daños, ser una señal de otros problemas cardíacos o un peligro inmediato para su salud. Las causas son diversas. La alteración en el corazón puede estar causada por niveles anormales de potasio u otras sustancias en el cuerpo, un ataque al corazón o daño al miocardio, una enfermedad cardíaca presente al nacer, una insuficiencia cardíaca o un agrandamiento del corazón e hipertiroidismo.
Las arritmias pueden no causar ningún síntoma. Sin embargo, a veces se pueden percibir algunos más notorios, como un aleteo en el pecho, latidos cardíacos acelerados, latidos cardíacos lentos, dolor en el pecho y falta de aliento. Otros síntomas pueden incluir ansiedad, fatiga, vahído o mareos, sudoración y desmayos.
Fibrilación ventricular
Cuando el ritmo del corazón es de forma irregular se puede tratar de una fibrilación ventricular. En ese caso, los latidos son con impulsos eléctricos rápidos y errantes, lo cual provoca que el corazón no bombardee sangre, sino que tiemble.
Al no hacer circular la sangre por el cuerpo, esta no llega a los órganos y, como consecuencia, conduce a una parada. Sin tratamiento inmediato, la fibrilación ventricular puede causar la muerte en minutos.
Tratamiento
¿Cómo se debe tratar una arritmia? En los casos más críticos, es necesario un desfibrilador eléctrico externo o realizar una reanimación cardiopulmonar. No obstante, dependiendo de la gravedad, el tratamiento es diferente. Hay algunos pacientes que pueden requerir implementar un marcapasos mediante una operación quirúrgica o la toma de fármacos vía intravenosa u oral.
También se pueden seguir tratamientos mediante pastillas cuando ya se ha padecido una y se quiere prevenir un segundo caso. Si la afección ha sido puntual y leve, es posible que la medicación sea temporal.