El Parc Güell es una de las zonas más bonitas de Barcelona. Se trata de un parque público, situado en el monte Carmelo, cerca de la sierra de Collserola. En un primer momento, Antoni Gaudí, su arquitecto, lo concibió como urbanización, pero doce años después del fin de su construcción, en 1926, fue inaugurado como parque público. Debe su nombre al empresario que lo mandó construir, Eusebi Güell, y su obra tardó catorce años en ejecutarse. Cuenta con jardines y elementos arquitectónicos muy característicos.
El parque obra del modernismo catalán es hoy en día una zona donde confluyen turistas y residentes debido a su belleza y a las zonas que han surgido en torno a él. Forma parte del catálogo Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO y también del registro de Bienes de Interés Cultural del patrimonio español. Ningún plan mejor que visitar el parque por la mañana y después cargar pilas en alguno de los restaurantes que existen alrededor de él. Los hay para todos los gustos y presupuestos.
Restaurant La Torreta Parc Güell
A unos pasos de la entrada del Parc Güell se encuentra este restaurante que ofrece bonitas vistas, buena carta y unos precios razonables. Destacan las carnes, como el cochinillo o el solomillo al Jerez, además de los platos de embutido. Para los que deseen una comida más informal, ofrece también platos combinados y opciones infantiles. Es un agradable lugar para comer antes o después de una visita por el parque. Merece la pena conocer su terraza con vistas a la ciudad de Barcelona y al propio parque.
El Restaurant La Torreta Parc Güell se encuentra en carrer d’Olot, 24. La parada de metro más cercana es Vallcarca, a unos 700 metros, pero a pocos pasos tiene un par de paradas de autobús (Parc Güell y Marianao – Mercedes, en donde para el autobús 116. Hay que tener en cuenta que el Restaurant La Torreta abre solo para desayunos y comidas, en horario de 9 de la mañana a 17.30 de la tarde. Para los desayunos, el chocolate caliente es una de sus especialidades más destacadas.
Comida de olla
No está junto al parque, pero sí muy cerca de él y por la calidad de sus comidas y su menú del día bien merece la pena caminar diez minutos para degustar sus especialidades. Las raciones son abundantes y hay que destacar que tiene un modelo original de carta. Tan solo cuenta con tres opciones a escoger en los entrantes, el plato principal y el postre. De este modo, se asegura la calidad de la comida y que son totalmente caseras, como si saliesen de la olla de la abuela. En el menú también se incluye la bebida.
Para los estómagos más discretos, se puede pedir medio menú por 11 euros, mientras que los más glotones pueden coger el menú completo por 14 euros. Incluye también la bebida. El ambiente es familiar y tranquilo, una buena opción en esta zona de Barcelona. Se encuentra a unos pasos caminando de la parada de metro Alfons X y también junto a la parada de autobús Praga – Rda Guinardó. Debido a su tipo de comida, abre solo al mediodía, en horario de 12.30h a 16.30h.
Restaurante Tibet
En esta ocasión, el comensal puede volar hasta un lugar de estilo rústico, con un ambiente algo más formal que los anteriores, pero muy bien decorado, con grandes ventanales que ofrecen una hermosa luz. Está especializado en cocina catalana y carnes a la brasa. Por supuesto, no pueden faltar en su carta los caracoles, los calçots (en temporada) y la butifarra. Su entrada se encuentra algo escondida, tras una pared de piedra, lo que le da al restaurante un aspecto íntimo.
Su dirección es carrer de Ramiro de Maeztu, 34. Para llegar en transporte público es aconsejable tomar la línea de metro que llega hasta Alfons X, mientras que quien prefiera hacerlo en autobús a unos pasos se encuentra la parada de Crta del Carmel – Ramiro de Maeztu. Está abierto para el turno de comidas y de cenas, de 13.45h a 15.45h y de 21.00h a 22.45h. Para llegar a Parc Güell se puede hacer en apenas cinco minutos caminando desde el restaurante.