En tiempos en los que el teletrabajo se ha impuesto como una medida imprescindible para luchar contra la expansión del Covid-19, todavía hay muchos sectores que siguen con su actividad normal. Son aquellos que se consideran de primera necesidad, como sanitarios, bomberos o agricultores. También hay otros que, a priori, no entrarían en esta categoría, pero a los que se les permite operar siempre que los establecimientos físicos estén cerrados y el trabajo se realice a través de reparto a domicilio.
Restaurantes, librerías o comercio online, muchas de estas empresas continúan trabajando para que el usuario pueda tener sus compras en casa con normalidad y sobrevivir así a una etapa económica muy complicada. Para garantizar la seguridad, tanto de sus trabajadores como de los propios usuarios, se ha implantado en muchas de ellas lo que se conoce como contacto cero. Gracias a este proceso se aseguran de que se siguen todas las medidas de higiene y que no se rompe la barrera de un metro de distancia entre el repartidor y el comprador.
Pedido a distancia y pago con tarjeta
Para hacer estos pedidos, el usuario solo tiene que entrar en la aplicación o la página web habilitada para hacer la compra, solicitar los productos que desea, indicar su dirección de entrega y su número de teléfono, y finalizar el pedido en el mismo canal. Se evitan desplazamientos al lugar, mientras este puede seguir operando con cierta normalidad, todo lo que permite la situación, pero con las puertas cerradas al público. Así se disminuyen los movimientos de las personas por la ciudad.
A la hora del pago, aquellas empresas que optan por el contacto cero ofrecen pago con tarjeta a través de la pasarela habilitada o cualquier otro método electrónico, como podrían ser PayPal, Bizum o similares. Todas estas opciones se ofrecen en el momento de realizar el pedido y tienen como característica común que el usuario paga desde casa y que el negocio recibe el dinero junto con la orden del pedido. De este modo, se evita que el repartidor y el comprador tengan que tocarse para dar intercambiar el dinero en efectivo o pagar con tarjeta en un datáfono físico.
El momento de la entrega
Entregar el pedido es lo más complicado en estos casos, ya que es cuando se produce el acercamiento entre el repartidor y el comprador, con el riesgo de aproximarse a menos de un metro o incluso tocarse con las manos. Por eso, el contacto cero incluye que el repartidor avisa de su llegada, pero deja la bolsa con la compra en el pomo de la puerta. Si el paquete es una caja, esta se queda sobre el felpudo. Una vez que el repartidor se ha ido, el cliente puede abrir la puerta y recoger su pedido.
Gracias a este proceso (pedido online, pago telemático y entrega sin abrir la puerta), todos los agentes implicados en el reparto a domicilio, tanto quienes hacen el pedido como quienes realizan la entrega, no se ven sometidos a riesgo de contagio por la proximidad con otra persona.
Otras medidas
Aparte de estas medidas que afectan al momento de la compra y la entrega, las empresas que abogan por el contacto cero implementan otra serie de medidas en sus locales y durante el reparto para garantizar la seguridad. Una de ellas, que todos los usuarios deberían conocer, es que el repartidor coge la bolsa siempre por la parte inferior y el comprador deberá cogerla por las asas. De este modo, nunca tocan la misma superficie y se asegura que el plástico no contagie. De cualquier modo, se indica al usuario que debe tirar la bolsa de plástico y los cartones inmediatamente y nunca reutilizarlos en esta ocasión.
Los trabajadores acuden al lugar de trabajo con mascarillas y se lavan bien las manos varias veces durante su jornada. Además, la plantilla se reduce al mínimo para mantener la distancia de seguridad y evitar la propagación. Las empresas que utilizan esta estrategia de contacto cero suelen indicarlo en su página web, en sus aplicaciones o en sus redes sociales, por lo que es interesante para el usuario informarse acerca de si se sigue esta política antes de hacer el pedido, para saber cómo será el proceso de entrega.