Así combaten los hoteles el desperdicio de alimentos
El turismo es, para las grandes superficies, un factor clave y decisivo a la hora de frenar el despilfarro de comida
18 marzo, 2020 20:14El turismo representa uno de los pilares fundamentales de España. Su gran clima acompañado de una importante variedad cultural seduce cada año a millones de turistas para elegir la península ibérica como principal destino de vacaciones. Una de las comunidades autónomas que más cantidad de visitantes recibe, en los 365 días del año, es Cataluña. Los hoteles de Barcelona, Lloret de Mar o Platja d’Aro se llenan durante gran parte del verano para acoger a los turistas.
La mayoría de establecimientos de este tipo suele contar con servicios de bufete libre. Los clientes gozan la oportunidad de poder degustar toda la variedad de alimentos que posee el lugar escogido para pernoctar. Estas facilidades a la hora de comer también tienen su parte negativa. Y es que los hoteles también se encuentran dentro del foco del desperdicio de alimentos, una lacra que se cobra millones de toneladas al año.
El planeta es el que pierde
Productos básicos como el pan o los huevos representan algunos de los productos más desperdiciados en España a lo largo del año. Las cifras alcanzan los millones y esas toneladas de desperdicio abastecerían parte de la sociedad que se encuentran en situaciones delicadas con el tema de la comida. A las pérdidas económicas y alimenticias se les suma un efecto aún más perjudicial para el planeta tierra.
El despilfarro de comida también influye negativamente en el planeta tierra. Todos esos kilos desperdiciados suponen hasta el 10% de los gases de efecto invernadero emitidos a la atmósfera. Este impacto medioambiental provoca una aceleración del cambio climático. Un cambio climático que cada vez va dejando más rastro de las consecuencias desastrosas que se pueden llegar a alcanzar. Los hoteles ya se han puesto mano a la obra para aportar su granito de arena.
Los ‘buffets’, un gran centro de desperdicio
Importantes cadenas hoteleras han comenzado a implementar diversas medidas para combatir esta lacra que acaba con una importante cantidad de alimentos al año. Grupos como Campanile o Accor ya se han puesto el mono de trabajo y han decidido tomar cartas en el asunto para un mejor futuro tanto en la alimentación como sus servicios. Y es que hasta el 30% de la comida que se sirve en los restaurantes de los hoteles acaba en el cubo de la basura.
Aprovechar todos los recursos posibles es el principal objetivo de los establecimientos hoteleros para poner fin al desperdicio de los alimentos. Tras aplicar los diversos cambios ya se han comenzado a vislumbrar los primeros datos esperanzadores. Cientos de hoteles de la cadena Accor ya han salvado más de 100.000 kilos de comida. Una cifra considerablemente inferior a la del desperdicio pero ilusionante de cara a un futuro próximo.
Todos entregados a la causa
Una de las medidas más comunes es la elaboración de packs. Con la comida que sobra cada día de los buffets se crean estos pequeños combos de comida que la gente puede adquirir por un precio bastante económico. Una técnica que consigue cambiar el destino de los alimentos sobrantes, ya que pasan de una basura a la cocina de un hogar donde cientos de familias pueden aprovecharlos diariamente.
Ya en meses anteriores otros establecimientos dedicados a la hostelería comenzaron a realizar diferentes prácticas beneficiosas para la causa. Una que recuerda a la de estos packs hoteleros es la de los tuppers. Y es que bastantes restaurantes se unieron a la iniciativa de guardar en recipientes aquella comida sobrante de los platos. Comida que los comensales se podrían llevar a su casa tras abandonar el restaurante.
Aún en el camino
Unir a todo este tipo de establecimientos es el principal objetivo de plataformas como Too Good To Go. Esta aplicación busca nuevas formas de poder salvar la vida a los alimentos cuyo destino serán los basureros. Numerosos locales de Cataluña ya se han unido a sus diversas iniciativas para acabar con este problema económico y medio ambiental.
Los hoteles también se encuentran dentro de esta ecuación cuyo resultado es evitar el despilfarro descontrolado de comida. Una ecuación que ya resulta factible en miles de hogares y locales que se dedican al servicio de la restauración. Aunque todavía queda camino por recorrer los pasos hacia la salvación de los alimentos son cada vez más grandes.