Fuerza nueva: así es la alianza entre Los Planetas y Niño de Elche

Fuerza Nueva es el nombre de un supergrupo formado por los padres de la música indie en español, Los Planetas, y por uno de los últimos adalides del flamenco experimental: Niño de Elche, que se unen en un nuevo proyecto conjunto.

Pero es que también es el nombre con el que era conocido el partido de extrema derecha liderado por Blas Piñar, consejero de las cortes franquistas, que fundó dicho partido en 1976, y que terminaría desapareciendo por su implicación en actos ultraderechistas.

Reivindicación musical

¿Y qué tienen Los Planetas y Niño de Elche que ver con esto? Pues, como resulta evidente, nada en lo político. Más bien, ambos artistas se unen para hacer la burla a la extrema derecha que ha acabado floreciendo en España tras las últimas elecciones, gracias a la caída de las posiciones de izquierda y al descontento general del electorado.

A través de esta nueva formación, están midiendo muy bien los tiempos para la publicación de su primer disco, que llegará, precisamente el 12 de octubre, Día de la Hispanidad. Mientras tanto, se han dedicado a publicar algunos singles bastante polémicos en fechas muy señaladas.

Fechas señaladas

Es el caso de su primer single, Los campanilleros, una canción popular (andaluza y navideña) readaptada que se estrenó precisamente por esas fechas del 2018. Después, le siguió una reinterpretación del Himno de Andalucía, llamada Santo Dios, estrenada el día de la comunidad, el 28 de febrero.

La Cruz, salió para Semana Santa, Una, glande y libre, celebrando (irónicamente) el día del alzamiento nacional, acompañada de La canción de los gitanos, otro himno popular, en esta ocasión, del pueblo gitano.

Le toca a Cataluña

Finalmente, la última de sus creaciones previa al lanzamiento de su disco ha sido retocar, a su manera, Els segadors, himno oficial de Cataluña. Con su tema Canción para los obreros de la Seat encarcelados en Segovia, Fuerza Nueva imagina esta canción como un himno proletario y antinacionalista.

Para ello, toma elementos de la canción original, pero la reinterpreta con un nuevo mensaje, en homenaje a un grupo revolucionario que se dedicaba a expropiar empresas y bancos para ayudar a los huelguistas y parados en los años del franquismo.