Ventajas de un buen desayuno antes de entrenar

Un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Bath en Reino Unido ha revelado que un buen desayuno antes de entrenar es fundamental para ayudar a nuestro cuerpo a quemar más carbohidratos durante la sesión de ejercicio, y que igualmente es ventajoso para ayudar a digerir mejor los alimentos después del entrenamiento.

Hasta ahora no se había estudiado cómo los ejercicios físicos afectaban al metabolismo de los carbohidratos. Tal y como afirma el profesor Javier González, experto en el Departamento de Salud y codirector del estudio, “este es el primer estudio que examina las formas en que el desayuno antes del ejercicio influye en nuestras respuestas a las comidas después del mismo. Desayunar antes de entrenar aumenta la velocidad a la que digerimos, absorbemos y metabolizamos los carbohidratos que podemos comer después del ejercicio”. Los investigadores consideran que los resultados podrán ser claves para la prevención de una gran variedad de enfermedades de origen metabólico, como por ejemplo la obesidad, diabetes mellitus tipo 2 o algunas enfermedades cardiovasculares.

Quemar carbohidratos

Para llevar a cabo el estudio, los investigadores compararon los resultados de entrenar después de haber desayunado y de entrenar en ayunas. Con este objetivo, reclutaron a 12 hombres completamente sanos y comprobaron sus niveles de glucosa en sangre y el glucógeno muscular antes y después de entrenar.

Los datos relevaron que aquellas personas que desayunaban antes de hacer ejercicio quemaban carbohidratos más fácilmente que aquellas que lo hacían en ayunas. Otro de los datos más destacables que se resolvió fue el hecho de que, después del entrenamiento, las personas que habían desayunado digirieron y metabolizaron el resto de las comidas de una forma más rápida. Desayunar antes de hacer ejercicio quema más carbohidratos. “Aunque el ayuno antes de los ensayos de laboratorio es común para controlar el estado metabólico inicial, estas condiciones pueden imposibilitar la aplicación de los hallazgos a las situaciones más representativas de la vida cotidiana porque la mayoría de las personas no ayunan durante el día", concluía el profesor González.