Comprar una casa es un deseo para muchas personas, una de esas metas que simbolizan estabilidad, independencia y un lugar propio en el mundo. La sensación de tener tu propio espacio, donde puedas construir recuerdos, decorar a tu gusto y sentir que perteneces a algún sitio, es realmente maravillosa.
Sin embargo, la realidad de encontrar una vivienda en los tiempos que corren es cada vez más difícil, dado lo caro que está todo. Lo que parece un simple sueño, a menudo, se convierte en una búsqueda larga y agotadora.
La vivienda de tus sueños
Te presentamos una vivienda ideal en un pueblo que te va a encantar: un chalet adosado en Sant Salvador, Tarragona.
Esta propiedad cuenta con una superficie construida de 131 metros cuadrados, de los cuales son útiles 120. Tiene 4 dormitorios, 2 baños, una terraza, armarios empotrados y un trastero. No adivinarás el precio. Todo esto por solo 165.000 euros. ¡Aprovecha, es una ocasión única!
En la planta superior, encontrarás, las dos habitaciones dobles y las dos habitaciones individuales junto con un amplio baño con ducha. Las ventanas tienen rejas y cierre con llaves, el suelo es de gres, las puertas son de madera y hay un toldo en la terraza.
Además, la casa cuenta con un armario bajo la escalera, un armario en la planta superior y una reforma en la parte delantera. Es de segunda mano, pero es muy luminosa y está lista para entrar a vivir. ¿Te gusta?
El barrio tranquilo de Tarragona
¿Dónde se sitúa esta magnífica vivienda? Se encuentra en el barrio de Sant Salvador, en Tarragona. Está muy bien conectada con transporte público y cuenta con comercios, colegios y un parque infantil cerca. A tan solo 15 minutos de la playa y del casco antiguo de la ciudad.
Sant Salvador se sitúa entre Els Pallaresos y Constantí, cerca del río Francolí y el barranco del Garrot. Se creó en una zona residencial en el año 1966, unos años antes del establecimiento del polígono del Morell y La Pobla de Mafumet. Después del impulso urbanístico inicial de los 70, en el que el Patronato municipal de la vivienda construyó 1500 pisos, el barrio prácticamente no creció durante los años 80. En la década siguiente, se amplió por la zona oeste con la construcción de viviendas unifamiliares, alrededor del paseo de Santa Isabel, y más tarde, por la zona este con la construcción de la urbanización de Sant Ramon.
La vida tranquila y la vivienda asequible han sido también motivos para que la gente venga a vivir a este barrio. Aunque está un poco más retirado del centro, es una de las zonas con la renta más baja de Cataluña.